martes, 27 de diciembre de 2011

Capitulo 21

-Franccisco, tenía muchas ganas de verte, he estado pensando en ti todo el día, te he echado un montón de menos.
-Estoy muy enfadado contigo.
-¿Por qué?
-No me has llamado ni una sola vez, ¿a eso se lo llama echar de menos?
-Mi amor he estado muy ocupada.
-Pero no has podido coger un hueco para llamarme, ¿no?
-Cariño, entiéndeme es mucho trabajo.
-Dime la verdad. ¿Me quieres?
-Si. Como la trucha al trucho.
-Déjate de bromas Laura, te lo estoy diciendo muy enserio.
-¿De verdad puedes pensar que no te quiero?. Perdona que te diga que tu tampoco me has llamado.
-Pues no lo sé, teniendo como de jefe a Karl, pues me pienso cualquier cosa. Y yo no te he llamado, porque pensaba que me llamarías tú.
-¿Y si me hubiera pasado algo y no te podía llamar?
-Eso no se me pasaría nunca por la cabeza, además no te ha pasado nada.
-Bueno, no quiero discutir por una tontería. Ya estoy aquí, eso es lo importante.
-Vale, tienes razón, es que estoy un poco celoso.
-Me gusta que estés celoso pero hasta cierto punto.
-Claro. Es que te quiero un montón.
-Y yo a ti. ¿Qué tal te lo has pasado sin mí?
-Muy mal, los espaguetis a la carbonara me salieron fatal.
-Pues mañana te los hago.
-Se me quemaron... Y estaban asquerosos, me encantan los tuyos. Que ricos.
-Y a mi me encantas tú.
Laura se le hecha encima a Franccisco. Se besan. Se suelta el pelo, se lo deja caer, tira el coletero sin rumbo fijo.

Lentamente, con los zapatos en la mano, las medias finas puestas. Su pantalón corto y su camiseta de tirante con rayas blancas y negras, va andando por el pasillo, su padre llegó hace cuatro horas, cenó y se acostó junto a su madre que tenía bastante sueño. Anda de puntillas, sin hacer el mínimo sonido para no despertarlos. Coge las llaves lentamente, abre la puerta y la cierra con mucho cuidado. Se pone los zapatos lo más rápido posible. Y sale a toda prisa.

-Tu hija ha salido.
-¿Cómo?
-¡Ah, es verdad que a ti no te lo he contado!
-¿El qué?
-Es que no sé si te lo podré decir, Andrea no va a querer que te preocupes ni nada.
-¿Qué pasa? -Lo dice en tono preocupado- Cuéntamelo.
-Cuando venga Andrea hablo con ella.
-¿Pero dónde ha ido?
-Pues no lo sé.
-Son las tres de la mañana, ¿Dónde va a ir una niña a estás horas?
-Pues a ver a la persona que ama.
-¿Qué?- Lo dice con rabia- ¿No tendrá novio?
-Si.
-¿Cómo se llama?
-Fede, déjalo estar, si tu hija quiere, que te lo cuente ella.
-¡Qué me lo cuentes coño!
-Tranquilízate, poniéndote así no vas a conseguir nada.
-Lo siento cariño.
-Además, tu hija ya es mayor para hacer su vida.
-Pero no lo bastante.
-Si. Acuérdate de que edad teníamos cuando empezamos a salir.
-Dieciséis. Pero eran otros tiempos.
-No cariño, Andrea está enamorada, como nosotros a su edad.
-Tienes razón, pero no puede salir a estas horas a ver a su novio.
-Ya, la bronca se la va a llevar, pero déjala que disfrute.
-Vale cariño.

-¡Enrico cariño! -Le da un largo beso- Tenía muchas ganas de verte amor.
-Yo a ti muchas más ganas, he estado todo el tiempo pensando en ti.
-¿Qué es eso tan importante que me tienes que contar?
-Pues a ver... Por dónde empiezo... Hace un año más o menos, mi padre desapareció. Llevo todo ese tiempo buscándole, sin respuesta alguna, sin ninguna pista. Quizás lo hayas visto en las noticias, porque denunciamos su desaparición.
-Espera, espera. ¿Por qué me cuentas esto? Y si, si lo vi en la tele.
-¡Espera que acabe leche!
-Claro, sigue, sigue. Sorry.
-La policía solo encontró su calcetín tirado en el anden, solo tenia huellas suyas, según los forenses que se dedican a eso. No tenía ni una mínima gota de sangre ni nada por el estilo. Nada. Entonces quiero decir. Que no pudo irse por su propio pie, o sea, que el no quería irse.
-¿Y eso por qué lo sabes?
-Porque, no se llevo nada de ropa, su cuenta del banco, está como la dejó. No va a trabajar ni nada.
-Bueno, puede que lo hayan secuestrado o algo.
-Mi padre era muy fuerte iba al gimnasio todos los días.
-Eso no tiene nada que ver.
-Encontré una carta.
-¿Qué ponía?
-Mi padre, dejo una carta debajo del colchón, confesando su mayor secreto.
-¿Cuál?
-Prométeme que no lo vas a decir.
-Te lo juro, si te quedas más tranquilo.
-Por las noches se convertía en hombre lobo.
¿¡Qué!? -Andrea se asombró- Pero Enrico eso no existe.
-Sabía que no me ibas a creer.
-Pues normal, quién se cree semejante historia.
-Pues yo, porque tengo pruebas.
-Quiero verlas.
-Hoy no, es muy tarde. Mañana cuando salgas del instituto te recojo.
-¿Y para que me has echo venir hoy?
-Por dos razones. Te quería contar esto lo más antes posible. Y dos, tenía muchísimas ganas de verte.
-Muy bonito eso de tu parte. Una pregunta... ¿Tu también eres un hombre lobo?
-Mañana cuando leas la carta sabrás todo sobre mí.
-Mmmmmm... Que intriga.
-Bueno hasta mañana, será mejor que duermas.
-Claro, buenas noches amor.

Andrea vuelve a su casa, abre la puerta lo más lento posible, se quita los zapatos y los coge con la mano derecha, mientras que con la otra pone las llaves en su sitio. Y cierra la puerta.
-Andrea, no hace falta que te quites los zapatos -Dice su madre mientras enciende la luz- ¿Dónde has estado?
-¿Mamá? -Dice Andrea con tono de sorpresa- He ido a bajar la basura.
-Si, a las tres de la mañana, y te has tirado una hora para meter la bolsa en el contenedor. Andrea, no me mientas.
-Vale, he estado con Enrico.
-¿No te he dicho yo que estas castigada sin verlo?
-Me tenía que decir una cosa importante.
-Si tan importante es, cuéntamelo.
-No puedo, juré y perjuré no decirlo.
-Andrea, no me gusta que me mientas, y ya eres lo bastante mayor como para que te vayas a las tres de la mañana y no obedecer a tus castigos.
-Mamá pero es que tu no entiendes lo mucho que me gusta, que tengo muchas ganas de verlo, que me desespero si no estoy con él, que me siento sola sin su olor. Que estoy muy enamorada, lo quiero más que a mi propia vida, que me quiere, y me da todo lo que otra persona me podría dar, ¿lo entiendes ya?
Andrea pilla un arrebato y se va directamente a su habitación, y de un portazo se encierra, en el único lugar en el que los peluches pueden sostener sus lágrimas y ayudarla.

Unas horas después, le suena el despertador.  Lleva la misma ropa de ayer. No se cambia, se peina un poco con el cepillo, se lo recoge un poco por los lados con una horquilla y sale disparada de la casa, con su mochila a cuestas. No la preparó, la lleva tal y como está.
-¡Andrea!
Andrea no hace caso a su llamada y sale a toda prisa.
-¿Qué le pasa a esta niña ahora?
-Fede, déjalo, es mejor que te calles.
-¿Y qué echo yo ahora?
-Nada, por eso, cállate
-Perdone usted, señora.

''Mi deseo es que tus deseos se cumplan.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Capitulo 20

Las horas pasan lentamente tumbada en la cama. Sola. Sin nada que hacer. Castigada de por vida; y encima sin móvil. ¿Qué hago? ¿me suicido?. Pobre Enrico, me echará de menos. Me estará llamando en este momento, este segundo, este instante. No puedo hacer nada.
-Andrea, voy a salir un momento, ahora vuelvo.
-Vale.
-No salgas mientras no este, estas castigada.
-Que si mamá.
Joder, que pesada que es. Por fin se ha ido. Voy a buscar el móvil.
Empieza a buscar el móvil. Por toda la casa. Primero por el cuarto de su madre. Mira en el cajón de la ropa interior. Lo encuenta.
Bien, que lista que soy. ¡Diez llamadas perdidas! Dios mio. Enrico, Enrico, Enrico, Enrico, Susanna, Susanna, Enrico, Enrico, Enrico y Susanna.
-Enrico.
-¡Andrea!. Estaba muy preocupado por si te habia pasado algo.
-No, no, estoy bien.
-¿Por qué no me coges el teléfono?
-Porque mi madre me lo ha quitado.
-Ya iba a ir yo a tu casa.
-Ja,ja. Mi madre no creo que te dejaría entrar ni nada.
-Pues entro por la ventana.
-Esta muy alto.
-Me da igual, escalo.
-Que imbécil.
-¿Por qué no has ido al instituto?
-Porque vengo cansada del viaje y no tenía ganas de ir.
-Pues no me gusta que hagas eso.
-Si, papá.
-¿Mañana tienes examen?
-No. Pero tengo que estudiar para una obra de teatro.
-¿Y eso?. ¿Tu que eres, el árbol?
-No tonto. Soy la protagonista.
-¿La princesa que viste de rosa?
-¡No! Pero mira, no estaría mal.
-¿Entonces?
-Pues va de una niña que se llama Sara que quiere ser futbolista. Pero debido a sus problemas de rodilla no puede. Tras muchas operaciones, consigue tener la pierna buena y se mete en un equipo de fútbol, tal y tal.
-Esta muy chula.
-Si, bueno... ¡Qué viene mi madre! Adiós, te amo.
-Vale, hasta luego, tengo que decirte algo importante.
-Pásate esta noche.
-Ok.
Cuelga rápido, y borra la llamada. Lo guarda en el mismo lugar de dónde lo ha sacado. Y cierra el cajón.
Corre a toda prisa a su habitación.
-Andrea ya he llegado.
-Hola mamá. ¿Dónde has estado?
-No es asunto tuyo.
-¿Mamá?
-Lo siento cariño, pero son problemas personales.
-¿No me lo puedes contar?
-No.
-Ah... vale... me parece... ¿bien?
-Ya te irás enterando con el paso del tiempo.
-¿Y papá?
-Luego vendrá, esta echando horas extras.
-Ah. Que pena, trabaja tanto...
-Pues ya. Para darte de comer día a día.
-Y a ti.
-Y a él. A los que vivimos en esta casa.
-Mamá.
-¿Qué?
-¿Por qué no te gusta Enrico?
-Ven, siéntate.
-Yo a Enrico no le veo nada malo, no sé porque no me dejas estar con él, ni verlo.
-No es que no quiera que estés con él. Pero es que yo conozco a su madre y es una bruja.
-Pero él es muy buena persona.
-Se parece mucho a su madre.
-No la conozco, pero Enrico no se parecerá nada. Eso que dices de su madre de que es una bruja y tal, no lo sé. Pero te puedo asegurar que Enrico no es así.
-¿Y cómo es según tú?
-Es buena persona, amable, siempre está donde estés tú. No es celoso, bueno, un poco, pero no exageremos, no llega al punto ese de las parejas que él se pone celoso y la maltrata. Enrico entiende todo lo que pasa, todo lo que me sucede, tiene algo mágico. Sé que él me combiene, que esta echo para mí.
-Pero sois muy diferentes.
-Los polos opuestos se atraen.
-Verdad.
-Además, que yo lo amo, que es lo mejor que me ha pasado en la vida, no lo cambiaría por nada en el mundo.
-Cariño. Tienes razón en todo, pero entiéndeme, me has mentido, te has ido a un viaje muy lejos de aquí.  ¿Y si te hubiera pasado allí algo por culpa de Enrico?
-Pero no ha pasado nada, mamá. Me ha tratado como una princesa.
-Mira. El castigo sigue puesto. Solo te voy a devolver el móvil. Pero hasta dentro de unos días no te voy a dejar verlo. ¿Te queda claro?
-Si.
-Vale. Espera.
Se va a su habitación, abre el cajón de la ropa interior y coge el móvil.
-Toma.
-Gracias.
-Y espero que te haya quedado bien claro lo que te he dicho. Y a papá ni una palabra de esto.
-¿No sabe que me fui con Enrico?
-No, y mejor que no se entere.
-Claro.
Andrea se va a toda prisa a su habitación, por parte esta muy contenta de que le haya devuelto el móvil pero por otra está triste de no poder verlo. Pero si lo mira por el lado positivo, cuando lo vea va a tener más ilusión.
-¿Andrea?
-¡Si! Mi madre me ha devuelto el móvil, pero todavía no me deja verte.
-Pues yo tengo que hablar contigo, te tengo que contar una cosa que me sucedió hace unos años.
-Cuéntamelo.
-No puedo por aquí, tiene que ser en persona.
-Ven esta noche, a las tres de la madrugada. Me esperas en la esquina de la derecha, en frente de la óptica. No tardaré.
-Vale. Te esperaré, no me falles.
-Lo mismo digo amor.
-No sé como te lo tomarás.
-¿Tan grave es?
-No es para tanto. Bueno, para mi sí. Pero como te lo tomarás a las tres de la mañana...
-Pues no se, depende de lo que seas. Si es que cortas, me lo tomaré fatal.
-No, no es nada de eso. Yo te quiero un montonazo.
-Yo muchísimo mas.
-Es personal.
-Ah. Que misterio. Bueno, voy a llamar a Susanna que tengo muchas llamadas de ella.
-Ok. Te quiero.
¿Que será? ahora el cabrón me deja con la intriga. Vaya putada. Voy a llamar a la tonta esa que ya sé de lo que me va a hablar, siempre me habla de lo mismo... Vaya niña, que cría, como ella no pilla nada nunca, pues que le vamos a hacer. Nada nuevo me contará. Siempre las mismas paranoias.
-¡Andrea! ¿Por qué coño no me coges el teléfono?
-Si, yo también tengo ganas de hablar contigo. Mi madre me quitó el móvil.
-¿Por qué?
-Pues porque le presente a Enrico y eso.
-¿Y qué pasa?
-Pues que no le gustó y me lo quitó.
-¿Y ahora por qué lo tienes?
-Porque me lo ha devuelto, he hablado con ella y ha entrado en razón y me lo ha dado.
-¿Y que tal el viaje? ¿Te has ido mucho a las nubes?
-Si, de vez en cuando. Pues ha sido perfecto, ha estado genial.
-Mañana me lo tienes que contar todo.
-Bueno, ya veremos.
-¿Por qué no has ido hoy?
-Estoy cansada y estoy estudiando para la obra.
-Que perra. Eso no se hace, me has dejado sola y me he tenido que ir con la más tonta.
-¿Quién?
-Con una que se llama Rebeca que es de tercero.
-Ah, ya se quien es, me cae fatal, es esa, la delgada que es medio cadáver ¿no?
-Exacto.
-Mañana te sacaré de las garras del zombie.
-Si, pero hoy bien que me la he tenido que tragar.
-Mala suerte.
-¿Y por qué no me dices que no ibas a ir?
-Guapa, te recuerdo que me quitaron el móvil.
-Es verdad. ¿Y para que está el fijo?
-¿Para que me lo quite mi madre también?
-Ah, que tampoco te ha dejado el fijo...
-No.
-Bueno pues best friend, quiero que mañana me lo cuentes todo, detalle a detalle, ¿te queda claro?
-Que si, que si.
-Bye.


''Los problemas difíciles siempre se resuelven''




lunes, 5 de diciembre de 2011

Capitulo 19

Dicen que los trenes nunca pasan dos veces, que cuando se cierra una puerta otra ventana se abrirá. Que los cuentos, sueños son, que si las miradas matasen, abría una lista de espera en el cementerio. Que cada siete segundos una pareja de todo el mundo fracasa, que las miradas se volaran mas que las miradas. Que los supuestos regresos, nunca salen como uno quiere y que la frase -Si te vas no vuelvas- Me persigue. Que escucho esa canción y me obliga cada vez a recordarte, que me hundo sí, me hundo con tus palabras. Este valiente corazón se esta metiendo una buena dosis de cobardía, y que menos que darle la razón. Odio las despedidas montadas en un adiós y las miradas que desprecian.
Ahora que todo  ha acabado, que nada mas nos une el rencor que tenemos el uno por el otro. Ahora que nuestros caminos se separaron hilando sendas nuevas por las que partir. Busquemos mucho tiempo a alguien que pueda satisfacer nuestra felicidad. Ese cenicero con miles de colillas apagadas, por ese recuerdo que no quiere salir de nuestra mente, que se tira horas y horas dando vueltas buscando una salida pero acecha en lo más trágico de esta gran mente sumergida en sangre. ¿Que decir cuando las palabras sobran? tal vez nada. El tiempo es demasiado lento para el que espera y demasiado rápido para quienes tienen miedo, demasiado largo para los afligidos, demasiado corto para los alegres, pero para los que aman el tiempo es una eternidad. Quiero ganar esta batalla en la que solo peleo yo y el amor, ¿podré vencer a una cosa tan fuerte? lo dudo, a momentos pienso que no, que no va a estar de mi lugar ni de mi parte, que no me hará caso, pero por lo menos sé que está en algún lado, sonriendo, siendo feliz. Solo que hay un problema, que le hace feliz otra persona que no soy yo. Quiero hacerla feliz y no llorar, estar junto a ella el tiempo que haga falta. Estoy esperando el futuro donde poder ganar.

-No, no, mueve esta mesa y coloca las cosas.
-Buena idea.
-¿Dónde pongo esto?
-Pues hay, en la esquina. Y no pienses mal.
-Vale, pero que hecho aquí.
-Lo que tu quieras, si total el plato se va a quedar vacío tarde o temprano.
-En eso tienes razón.
-Claro, cariño es que no piensas.
-Ja,ja,ja. Yo también te quiero.
-Ten cuidado a ver si lo derramas.
-Hay que ver.
-Eso lo tendría que decir yo, no tú.
-Lo que tu digas.
-Oh, no me digas eso.
-¡Qué se enfada!
-Tanto como enfadarme no, es una tontería.
-Andrea, no me he dado cuentas que has cogido regaliz.
-Pues ya te has dado cuenta.
-Que graciosa que eres.
-Ya lo sé amor.
-Ja,ja. Quedan cinco minutos.
-¿Esta todo listo?
-Si, a no ser que quieras echar algo más.
-No, no, creo que esta bien así.
-Yo también.
En la mesa han colocado tres platos con varios snacks en cada uno de ellos, luego las gominolas a parte. Los dos vasos de coca cola hasta arriba, casi para derramarse. En la mesa han puesto un mantel de flores de todo tipo, con el fondo verde.
Se sientan en el filo de la cama. Están echando a suertes lo que quieren cada equipo el real Madrid campo derecho y el Barça la pelota. Comienza el partido.

-Cariño, cariño, despierta.
-¿Qué pasa?
-Que te has quedado dormida.
-¿Qué hora es?
-Acaba de terminar el partido, tenemos que volver a España.
-¿Quién ha ganado?
-El Madrid.
-¿Cuánto?
- 2-1
-Pues ya sabes lo que toca.
-Ya. Bueno, he preparado las maletas, he pagado ya el hotel y nos vamos ya.
-Vale, ¿a qué hora sale el avión?
-Dentro de quince minutos. No vamos ya.
-Vale, ¿no te dejas nada, no?
-No, he revisado todo. Coge tu móvil que esta ahí en la mesa.
-Vale cariño.

Cogen las maletas, el móvil. Bajan deprisa. Cogen el taxi, se dirigen al aeropuerto.

2 horas después.
-Mamá, ya estoy en casa.
-Hola hija, ¿qué tal el viaje?
-Muy bien.
-¿Te llamo Susanna?
-Si.
-¿Y dónde está?
-¿Quién?
-Tu novio.
-En la puerta.
-¿Y no me lo vas a presentar?
-Claro. ¡Enrico, ven!
Enrico entra muy preocupado, se pone justo en frente de su suegra.
-Y bien, ¿este es tu chico?
-Si, mamá.
-¿Que edad tienes?
-22 señora.
-Es mayor que tu, ¿no?
-Si.
-¿Os queréis?
-Mucho.
-Yo soy Marisa, encantada.
-Yo Enrico, mucho gusto.
-¿Por qué me mentiste?
-Porque sé que si te llego a decir que voy con él no me hubieras dejado.
-¿Quién ha dicho eso?
-Yo.
-Pues eso es mentira, claro que te hubiera dejado, solo que me lo tendrías que haber presentado mucho antes. ¿Cuánto lleváis juntos?
-Mes y medio.
-Vale. Andrea una cosa. Estás castigada.
-Vale.
-Y que este chico se vaya ahora mismo.
-Perdone por las molestias. Tiene una hija encantadora.
-Muchas gracias.
-De nada. Adiós.

''Hay tantas canciones que puedo cantar para pasar el tiempo. Y me estoy quedando sin cosas que hacer para sacarte de mi mente.''



miércoles, 30 de noviembre de 2011

Capitulo 18

Ya quedan dos horas para el partido, Andrea y Enrico siguen tirados en la cama sin nada que hacer.
-¿Qué te apetece hacer?
-Si quieres podemos ir a comprar algunos snaks para picar mientras vemos el partido.
-Vale, pero yo quiero papadeltas o doritos que me encantan.
-Lo que tu quieras mi amor.
-Ja,ja vale.

''El tiempo pasa y pasa, y yo sigo así, queriéndote en mis brazos sin poderte tener, y busco una salida para no verte así, hay que lejos de mi lado tu amor esta de mí.
Yo lloro, y lloro al saber que no estás, con mis labios mira mami yo te quiero besar, y trato y trato por no sentirme así, pero es malo saber que ya no me quieres a mi. Yeah check it out now''

-¿Por qué pones esa canción?
-Porque me gusta.
-¿Pero va por alguien en especial?
-Para ti Laura.
-A ver, no lo entiendo, tu has venido aquí por Andrea y, ¿te has enamorado de mí?
-Si.
-¿Pues que hacemos aquí? Jefe, si no vas a por Andrea mejor que nos vayamos de Londres.
-Nos vamos esta noche.
-¿Para qué?, ¿para coger el vuelo donde ellos van? No te entiendo.
-No, para estar más tiempo contigo.
-¿Desde cuando te gusto?
-Desde que te conocí.
-¿Y para qué vamos detrás de Andrea y de Enrico?
-Para que no sospecharas de que te quiero y estar contigo por alguna razón.
-Pues no me gusta este juego, eso de espiarlos, de planear cosas...
-Es que también me gusta ella, tengo su espina clavada pero la tuya es bastante más grande y más profunda.
-Joder, me quiero ir a España.
-Pues vete, hay tienes la puerta.
-¿Qué?, ¿enserio que me vas a dejar ir así sin más?
-Yo no quiero que te vayas, pero por lo que veo no quieres estar conmigo.
-Mira, llevo trabajando como dos meses contigo, planeando tareas imposibles, poniendo en riesgo mi vida por ti, peleándome día tras día con Franccisco y, ¿tu vas y me dices que coja la puerta y me vaya?
-A ver Laura, yo a ti no te importo, tu vas ha hacer lo que te apetezca, yo no te puedo pedir ni que salgas conmigo ni nada.
-Pero si de verdad te importo no me hubieras dicho que hay tengo la puerta.
-Y te quiero, pero tu eres libre de hacer lo que quieras.
-Me estas dando a entender que no te importo.
-Para mí eres la mejor, pero no somos nada, ojalá que seas mi novia y estar toda la vida juntos, pero yo no te voy a obligar ha hacer cosas que tu no quieras.
-¿Por qué lo dejaste con Andrea?
-Porque se supone que me puso los cuernos y yo le pegué.
-Entonces que, si salgo contigo y te pongo los cuernos también me pegas?
-No.
-¿Por qué?
-Porque yo a Andrea no la quería.
-¿Entonces?
-Me dio mucha rabia.
-Pero, tu no puedes pegar a una mujer por eso, ¿y si la llegas a matar?
-Pues en ese momento es lo que sentía.
-Pues te controlas.
-No pude.
-Karl, no me vengas con memeces.
-Laura cariño, he cambiado, en todo este tiempo me e vuelto más maduro gracias a ti.
-¿Maduro? ¡si quieres matar a Enrico!
-No exageres, el plan no va de eso exactamente.
-Vale, mal tratarlo igual que a Andrea.
-Laura por favor, no saques más el tema, te puedo demostrar que he cambiado que no soy el mismo de antes.
-¿Y como lo compruebo?
-Saliendo conmigo.
-No.
-¿Por qué?
-Te lo he dejado muy claro. Quiero a Franccisco.
-Vale, Laura lo que tu quieras, no te voy a presionar, pero se que me quieres.
-Como jefe y amigo si.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Capitulo 17

-Buenos días princesa.
-Buenos días.
-¿Qué tal has pasado la noche?
-Bien, pero estoy un poco cansada.
-Normal, si nos quedamos hasta tarde viendo a los patos.
-Que gracioso. No es por eso.
-¿Entonces?
-He tenido una pesadilla.
-¿Cuál?
-Que te perdía.
-Cariño, no quiero que vuelvas a soñar eso, que me enfado. Nunca lo vamos a dejar te lo juro.
-Es que los sueños no los elijo yo.
-Ya, pero que no quiero que pienses eso.
-Vale mi amor, es que temo perderte.
-No me vas a perder...
-Te amo.
-Mira, esta tarde echan en la tele el Madrid-Barça, ¿hacemos apuestas?
-Vale, yo 2-1 para el Madrid.
-Yo para que no sea igual, 1-2 para el Barça.
-Si tu eres del Madrid.
-Ya pero así más emoción. ¿Qué apuestas?
-Si acierto yo o gana el Madrid te hago una cosa muy especial, te va a gustar.
-Pues yo... una cena muy especial que te vas a quedar pasmada.
-Lo mio va a ser mejor, te lo aseguro.
-Ya veremos.
-Ojalá que gane el Madrid.
-Quien sabe, es un 50%.
-Ya, pero es que nosotros somos más buenos.
-Eso ya lo sé.

Laura sale de la ducha, lleva una toalla en la cabeza y el albornoz hasta las rodillas, atado con un nudo a la cintura. Karl está sentado en la cama leyendo una revista.
-Laura, esta tarde es el Madrid-Barça.
-Vale.
-Andrea es del Madrid y le encanta el fútbol, con lo cuál se quedaran en la habitación.
-Yo soy del Barça- Lo dice mientras se quita la toalla de la cabeza.
-Estas muy guapa.
Laura se sorprende y le mira.
-Gracias.
-Creo que me estoy empezando a enamorar de ti.
-Estoy enamorada de Franccisco.
-Y yo de ti.
-Pero no puede ser.
-Si tu quieres si.
-Es que quiero a Franccisco.
-Bueno, si te lo piensas mejor me dices.
-¿Qué?, ¿qué te hace que vaya a cambiar de opinión?
-Todo o tal vez nada.

Suena el móvil de Andrea, va corriendo, ha dejado el móvil en el borso que está colgado en el pomo de la puerta. No mira quien es, como de costumbre. Descuelga.
-¿Si?
-¡ANDREA!
-¡Hay! No chilles.
-Perdón mujer, que sensible que eres.
-Susanna...
-¿Interrumpo algo, chica ocupada?
-No, siempre piensas en lo mismo.
-¿Y tú que sabes si estaba pensando en eso?
-Te conozco mejor que a mi mano que la veo todos los días.
-Más bien a Enrico que seguro que no te separas de él ni un milímetro.
-¡Qué dices boba! Cuando me ducho estoy a varios metros de él.
-Si no se baña contigo, claro.
-Bueno, si, ¿quieres algo importante?
-Si, tu madre lo ha descubierto.
-¿¡Qué!? No puede ser. ¿Cómo?
-Porque se ve que quedo con mi madre para hablar del viaje y mi madre no sabía nada, y vino a mi casa y me vio.
-¿Y qué dijo mi madre?
-Estaba un poco preocupada y un poco enfadada.
-¿Le has contado algo?
-Todo.
-¿Y que te ha dicho?
-Que hablará contigo esta noche, cuando vuelvas. Ah, y dice que lleves a Enrico para verlo o conocerlo.
-Joder, que imbécil eres, anda que se te puede encargar algo.
-Pero que dices, tonta.
-Me dijiste que te hacías cargo de la situación y yo te contaba todo lo que pasara.
-¿Habéis echo algo?
-No te lo voy a contar porque tu no has echo tu parte del trato.
-Jo, encima que le he dicho a tu madre que no te regañe y que no te llamara para no molestar.
-Pues cuando llegue a mi casa va a ser peor.
-Bueno, por favor, no te enfades conmigo, yo no sabía que iba a venir a mi casa.
-Vale, porque ahora estoy muy feliz, pero ya hablaremos tu y yo cuando llegue.
-Que miedo.
-Pues tenlo, no te vendría mal.
-Bueno, ¿qué tal todo por ahí?
-Si, ahora vas de buenas, ¿no?
-Solo era una pregunta.
-Pues todo muy bien, me quedaría aquí para siempre.
-Necesito verte, así que llega antes de las diez.
-Si hombre, el partido acaba a las ocho, y vamos a coger el vuelo de las diez, así mi madre está más cansada y no me dice nada.
-Porque tu no has visto la cara que tenía. Bueno, pues cuando llegues me llamas para ir a verte.
-Joder, me cago en diez.
-Y yo en once y no se que es peor.
-Bueno te cuelgo que me esta llamando mi príncipe desde la cama.
-Ja,ja que cerda que eres hija.
-Oye que no vamos a hacer cochinadas.
-No me imites coño.
-Habla bien.
-Hablo bien.
-No.
-Si.
-No.
-Bueno, lo que tu digas, pero tu hablas peor.
-Que va, que va.
-Venga adiós princesa, que folléis mucho.
-Vaya tela. Adiós.
Cuelga el teléfono, y se tumba en la cama.
-Se lo ha contado.
-¿El qué?
-Que estoy aquí contigo.
-¿Y qué ha dicho?
-Pues dice que cuando llegue a mi casa quiere hablar conmigo y contigo.
-¿Conmigo, por qué?
-Porque tu eres el que lo ha preparado todo.
-¿Se lo tomará bien?
-No creo, eres un poco mayor que yo.
-Tampoco tanto solo seis años.
-¿Te parece poco?
-Hay gente mayor, ¿me estás llamando viejo?
-No cariño.
-Vale, ya decía yo.


martes, 22 de noviembre de 2011

Capitulo 16

Diario. Veintidós de Marzo de  dos mil once.
En la vida hasta las personas que menos te esperas pueden hacerte mucho daño, en esos momentos no sabes que hacer. A veces, lo mejor es callarse, pero por experiencia, que me he callado muchas veces por no decir todas, por momentos explotas, y llegas a un punto donde es incontrolable esa ira. Hay veces en las que tienes a una persona que te dice que pares, que frenes, que es mejor dejarlo estar, que contra mas sigas va a ser peor para todos y más para ti. Una amiga, que piensas que tu amiga te puede hacer muchísimo daño, llamar a las personas más ''chungas'' del instituto o de la calle, de donde sea. Pero esas personas no se dan cuenta de lo que están haciendo, es mejor ir de una en una a que veintiocho se peleen contra una, que por fuerza de voluntad no llama a nadie, e intenta que todo valla mejor.
Pero esa persona provoca, hasta un límite, tu no puedes más, explotas, tu ira sale de una forma incontrolable, pero aquella persona esta. Te para, te frena, te huye y aun que al principio te enfades, luego reflexionas y piensas que lo mejor es que te hubiera parado, y se lo agradecerás toda tu vida.
Una de las peores cosas que odio es que las personas que te critican o que te quieren pegar, o lo que sea. Luego cuando le preguntas o le hecha la culpa a otro o dice que el no ha sido, cuando de verdad sabe que a sido él o ella. La gente falsa es que a la cara va muy de buenas pero a la espalda te pone negra. Y porque no digo nombres porque sino...
Esa persona se llama Susanna, si, esa amiga mía que nunca se separa de mi, la que siempre esta hay donde tu lo necesites, pero se ha alejado y ahora todo cambia las cosas. Una de mis amigas, por no decir la mejor. Nunca he pensado que llegaría a ser tan antipática y poner a tanta gente en contra de mí. Nunca le haría eso. Pero que le vamos a hacer la gente es como es, o como quiere ser y no se da cuenta del error que esta cometiendo. Yo con Susanna no quiero estar así pero es que si nos perdonamos no va a ser lo mismo. Pero estar peleada con tanta gente es muy bochornoso y más que te den ataques de ansiedad y no poder dormir por las noches pensando en lo que te puede parar mañana, y no tener a esa amiga que te apoya, que te quiere, que te da cariño. Esos momentos en el que necesitas un hombro por el que llorar o una mano para que te coja, que te de fuerzas en cada momento. Varias veces tenemos nuestros momentos malos, pero tenemos mejores momentos que nadie cambiaría ni por nada en el mundo.

-¿Te peleaste con Susanna?
-Si, hace un tiempo.
-¿Y que pasó?
-Pues que empezó a estar rara conmigo, no me trataba igual.
-Ah, pues no te hubieras perdonado con ella.
-Dijo que estaba muy arrepentida, y yo la quería demasiado.
-Eres muy buena persona.
-Gracias.
-Bueno, ya he leído bastante tu diario.¿Vamos a dar una vuelta?
-Claro.

Andrea coge su bolso y salen del hotel, le agarra la mano. Van caminando por esa ciudad que casualmente a las doce de la mañana hay gente, todas ellas hablando en inglés, lo bueno es que saben hablar que si no iba a ser muy difícil estar por allí al ir a un bar o al cine...
-¿Dónde vamos?
-¿Quieres un café o vamos ya al restaurante?
-Prefiero ir a dar un paseo, dónde haya vistas bonitas, y después a comer, ¿qué te parece?
-Todo lo que digas, perfecto.
-No, si no te gusta, no importa.
-Claro que me gusta cielo, pero tu más que lo sepas.
-Te quiero.
-Ah, he estado viendo en internet que hay un parque con un estanque con patos.
-Pues vamos.
-Vale, pero tendremos que andar un poco.
-Contigo se pasa las horas volando.
-Lo mismo te digo.

Andan, mientras ríen, mientas hablan de todo en general, insultan a los guiris, aún que hay los únicos guiris que hay son ellos. A veces dicen que uno lleva la mochila hasta el cuello, que queda de muy catetos. Otras de que son muy pálidos de piel, pero ella se queja porque le encanta Edward de la saga Crepúsculo. Y él hace que se enfada. Pero Andrea con un beso y unas simples palabras puede arreglar hasta un mundo. Porque es bellísima. Hablan de que la calle está muy limpia no como en España que pasas por cualquier esquina y te encuentras un excremento de perro pisado, y sigues caminado y están las pisadas de como esa persona se lo ha intentado quitar. Pero en fin, no es momento de hablar de ello, no es por nada, pero es que puede haber gente que este comiendo o que tenga mucho asco. Pero lo más importante es que ellos son felices uno al lado del otro. Hay personas, mejor dicho bestias, que maltratan a una persona física o psicología, a saber porque, quizás se sientan mejor ellos mismos, pero que se pongan en el lugar de la mujer maltratada, y sentir lo que siente y le arruinara la vida, por esos malos tratos.
Lo bueno, diría yo, lo mejor que tiene Enrico, es que es muy buena persona, jamás le ha puesto encima la mano a una mujer, y nunca lo hará. La quiere tanto que se mataría primero antes de pegarle, la defendería de todo ataque de personas violentas, o de animales, o de seres fantásticos, pero nunca va a tener nunca Andrea un rasguño, perdería su vida por ella, daría lo que fuese, hasta lo imposible para que ella esté a salvo, porque la quiere. Nadie encuentra a personas así pero ella ha tenido mucha suerte por encontrar a una persona así.
Llegan al parque, ya son las una. Han tardado una hora.
-Que rápido pasa el tiempo.
-Estando contigo todo pasa muy rápido. ¡Qué bonito el estanque!
-Vaya, mira los patos.
-Si hay, 1... 2... 3... 4... 5... y 6
-Pues yo he contado siete.
-Que no, que hay seis.
-A ver, 1... 2... 3... 4... 5... y 6
-Has visto.
-Es verdad cariño, tienes razón.
-¿Y cuándo no la tengo?
-Siempre la tienes.
-Era broma.

(L)

''Si el amor esta a la vuelta de la esquina, yo debo de vivir en una rotonda''



sábado, 19 de noviembre de 2011

Capitulo 15

Todos tenemos defectos, unos se notan más y otros menos. Hay defectos en el físico que todo el mundo quiere ocultar pero por mucho que lo intentes no puedes esconderlos de la luz, todos lo ven. Pero el mayor defecto esta en el interior, si no sabes tratar a las personas como se merecen ya es un defecto o si maltratas, pegas a una persona también es un defecto y lo peor es que la amas. No importa lo que halla en el exterior lo que importa es el interior, por muy guapo que sea, aun que tenga los ojos más bonitos que nadie halla visto, si el interior no es perfecto no sirve para nada esa persona. Un gran ejemplo es Karl, muy guapo por fuera, pero por dentro es un egocéntrico; un falso; un egoísta y lo peor, que es un maltratador.
Pero hay muchísimas personas que lo tienen todo, como Enrico, es el más guapo diría yo del mundo y su interior es impresionante, tiene carisma y es divertidísimo, me hace feliz, no lo cambiaría por nada. Me da todo lo que una chica, mujer, niña o señora puede desear en su vida. Yo soy una afortunada, he encontrado al hombre perfecto, no hay nadie como él. Karl ya es pasado pisado y no quiero que por ninguna razón me espíe o que este aquí en Londres, ya si que no le hablaría en la vida. Porque no es normal que te acosen de esa manera, cada persona tiene que tener su espacio sin agobios y más que estoy rehaciendo mi vida con una persona impresionante de lo nunca visto. Yo nunca he pensado que el amor es una estupidez, pero hay personas que no quieren enamorarse para no sufrir, pero aquellas personas no lo han sentido nunca; lo mejor es sentir que te quieren, que te hacen feliz, que te digan cada mañana lo maravillosa que eres y lo guapa que estas recién levantada. Pero sinceramente hay personas para todo. He aprendido a valorar las pequeñas cosas que nunca han tenido importancia, pero ahora la tienen. Mientras exista este mundo todas las personas del planeta se enamoraran aun que no quieran, pero es que nadie elige su destino, nadie puede ver el futuro y nadie puede saber de la persona que se puede enamorar. Puede que sea la persona más horrible del mundo o el más gordo, el más flaco. Pero como ya he dicho lo que importa no es el físico. Una persona se enamora de otra por su personalidad. Yo en cambio me e enamorado de una sonrisa. Yo decía que algún día iba a atrapar esa sonrisa y así he hecho, he ido a por todas, he recorrido cientos de kilómetros para conseguirlo, a él. Lo mas maravilloso de esto es que soy la mujer más feliz del universo o más allá y nadie podrá arrebatármelo.

-¿Qué escribes?
-Nada.
-¿Es tu diario?
-Si.
-¿Y qué dices en él?, ¿hablas de mí?
-Si. De ti y de mi vida en general.
-¿Me dejas leer?
-No.
-¿Y algún día?
-Si me lo coges sin que me de cuenta, que le voy a hacer.
-Gracias por decirme lo que tengo que hacer.
-Pero si te pillo, me enfado.
-¿Por qué?
-Porque un diario es privado.
-¿Hasta para tu novio?
-Pues si.
-Parece ser que mi novia querida no confía en mí.
-Si confío, el que no confía eres tú que quieres leerlo, eso es que crees que estoy con otro.
-Por nada en el mundo. Es que quiero leer las cosas bonitas que dices de mí.
-¿Y si es malo?
-No creo, conociéndote.
-Vale, hablo de ti muy bien.
-Pues déjame leerlo.
-¡Que no!
-Jo.
-Cuando termine si eso te dejo, pero es que estoy por la mitad.
-Pues si mira que trozo has escrito ya, que largo.
-No te creas... Mira te voy a enseñar una página, bueno cuatro páginas de A4 que escribí cuando corte con Karl.
-Dios.
-Pues ya ves. Es que me entro unas ganas de escribir.
-No si ya veo, te cansaste un poco de escribir, ¿no?
-Pues un poco pero es que estaba tan concentrada en los insultos que ni me dí cuenta.
-Ja,ja,ja, no veas.
-Bueno que quiero seguir escribiendo.
-Sigue, sigue. Pero yo me voy a acostar que es muy tarde.
-Vale ahora voy yo.
-Ok.

Ahora mi príncipe azul se ha ido a dormir, lo quiero mucho, me hace sentir como una reina. Para mí ahora mismo soy la princesa que está en su castillo con su príncipe que lo protege de toda bruja, dragón o enanos que quieren matar a la más guapa del reino. Pero que hay tengo a un príncipe, bueno, mi príncipe. El más guapo de todo el reino, el más bueno de todo el reino. Y yo soy la afortunada de tenerlo. Que todas las mujeres me tienen envidia porque él solo tiene ojos para mí, que daría toda su vida por salvar la mía. Que esa espada de plata afilada se clave en el corazón del dragón verde que escupe fuego. Y querer ser como una barbie que tiré su pelo por la ventana más alta del castillo y que mi príncipe escale hasta llegar a mí y besarme hasta que se quede sin salida, hasta que la lengua se nos hinche y que los labios se pongan rojos. El beso será el más apasionado y llegar a más y hacer más y seguir y no parar. Y ahí saber lo mucho que me quiere, lo mucho que me ama. Y yo estar enamorada y en vez de sentirme como una princesa, sentirme como una reina. No dejar nunca de ser la princesa del reino y que él me siga queriendo para toda la eternidad. Que en los momentos más tristes de mi vida, que el me consuele, que me haga reír, que me haga feliz. Y que en los momentos de alegría pasarlos con él hasta el último momento, hasta reír al más no poder. Lo que sé es que me quiere, que todo eso es capaz de hacerlo y me quedo corta, que sé que nunca me dejará. Y nunca llegar a las manos de Karl, que para mí es como el dragón verde que escupe fuego.

''El amor hace que su alma salga de su escondite''

viernes, 18 de noviembre de 2011

Capitulo 14

-¿Te ha gustado?
-Mucho, ¿y a ti?
-Muchísimo, ¿te he echo daño?
-Para nada, ha sido impresionante.
-Pues si.
-Dime alguna estupidez.
-¿Por ejemplo?
-Te quiero.
-Yo te quiero más.
-Sabes que no.
-¿Sabes? esto es solo el principio.
-Bueno, conociéndote no merece la pena hacer la pregunta.
-Ja,ja,ja como me conoces amor.
-Bastante.
-Vístete, ponte la ropa que más te guste, ponte de cine.
-Son las once.
-¿Qué pasa?
-Nada que es un poco tarde.
-¡No! Nos quedamos muy pocos días hay que aprovecharlos al máximo, asta el ultimo segundo.
-Claro cariño.

Noche cálida, noche amable, noche de pocas personas en medio de una ciudad de muchos edificios y paisajes bonitos, noche tal vez la más bonita que nadie a visto, noche que jamás nadie verá en ningún otro lado. Andan por la calle, tranquilos, felices, ilusionados. Se han quedado como un pincel. No tienen ni la mínima mancha en la ropa. Entran en un bar que le llama mucho la atención, ''Restaurante: Laguna negra''. Ese restaurante lo vio Enrico por internet. Le gusto mucho, parecía un buen sitio para una cena romántica. Las mesas están separadas unas de otras para molestar lo menos posible. En un lado del restaurante pone fumadores y en el otro no fumadores. Se van donde pone fumadores. Se sientan en las sillas de esparto con la madera en color rojo, haciendo juego con el mantel. Hay varios tipos de cubiertos para los distintos tipos de comida. Piden una pizza a los cuatro quesos y unos espaguetis a la carbonara. Enrico pide una botella Lambrusco y ella una Coca-cola. Enrico saca el paquete de cigarrillos de su bolsillo, y el mechero. Le da uno a Andrea y otro para él. Empiezan a charlar de todo un poco de lo bonita que esta la luna de lo preciosa que esta ella. De lo bello que es.

-¿Cómo que no están? Me podrías haber avisado.
-Pues si estabas en la ducha.
-¿Y que pasa? Puedes tocar o entrar directamente que a mi no me importa.
-Pero a mi si.
-Pues haber gritado.
-Bueno ya es tarde. Si no nos damos prisa no llegamos.
-¿Dónde? ¿sabes donde están?
-No.
-Pues entonces. Londres es muy grande.
-A ver Karl. Seguramente habrán ido a cenar. Busca un restaurante bonito y dentro estarán.
-Bien pensado.
-Que harías tu sin mí.
-Lo malo es que hay secretarias que se lian con sus jefes, pero en este caso no es así.
-Porque yo no soy tu secretaria, soy tu ayudante.
-Pero es casi lo mismo.
-Tengo novio Jefe.
-¿Qué mas da?
-Le quiero.
-Bueno, que sí, que llegamos tarde.

Salen en busca de ellos, andan a paso ligero, pero miran con mucho detalle todos los locales. Al final llegan a uno con una fachada de piedra, con mesas al exterior. El restaurante es el Laguna Negra. Entran y los ven, ahí sentados, comiendo, riendo. Karl no lo soporta, no puede ver lo feliz que es con otra persona que no sea él. Es machista. Tal vez por eso corto. De lo único que puede estar seguro es  de una cosa, quizás la mas importante. En la vida todos tenemos un secreto inconfesable, un arrepentimiento irreversible, un sueño inalcanzable y un amor inolvidable.

-Mi amor, ¿te gusta la pasta?
-Lo que me gusta eres tú.
-Cariño, no mientas, que la pasta está mas buena.
-No, te equivocas, eres tú.
-Vale me equivoco, eres tú y punto.
-Los dos.
-Vale.
-Es que eres una cabezona.
-Y tú.
-Pero es que a ti cuando te entra una cosa en la cabeza no hay quien te la saque.
-Pues claro, como tiene que ser.
-Si, si
-Te amo.
-Ja,ja
-Me encanta que  te enfades.
-Y a mi que te burles.
-No me burlo, solo digo que me encanta.
-Y yo digo que eres lo mejor que me ha pasado en la vida.
-¿Cómo no te voy a querer con lo precioso que eres?
-Me vuelves loco.
-Tu a mi más.
-Excuse me. Four cheese pizza- Interrumpe el camarero.
-Thank you.
-Nos ha interrumpido el camarero.
-Pues mejor.
-¿Por qué?
-Porque estamos liando una.
-¿Qué dices?
-Que prefiero que me lo demuestres con un beso.
-Aquí no te voy a dar ningún beso.
-¿Y eso?
-Porque prefiero hacer otras cosas.
-¿Como qué?
-Te lo cuento más tarde.
-Vale mi amor.
Siguen comiendo, bebiendo, fumando. Y tal vez, dentro de muy poco o dentro de mucho ese amor se acabara o quizás nunca.

''La risa es un tranquilizante sin efectos secundarios''

Un beso peeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeña! Espero que os este gustando. Esta historia de amor, de misterio, seguirá. SEGUIDMEEEEEEEEE!(LLLL

martes, 8 de noviembre de 2011

Capitulo 13

-Mi amor, ¿qué vamos ha hacer esta noche?
-¿Qué quieres que hagamos?
-Lo que tu quieras cariño.
-Yo quiero hacer lo que a ti te apetezca.
-Si yo te contara...
-Pues cuéntamelo.
-Es que si tienes algo preparado te lo estropearía.
-No tengo nada preparado, solo tengo velas en mi maleta, ya lo que tu quieras hacer con ellas.
-Pues comérmelas como que no, metermelas por la nariz tampoco. ¡Ya está!. Vamos a encenderlas.
-Te ha costado... Ja,ja,ja.
-Si, si, lo estaba haciendo de broma
-Ya, claro.
-Enrico, antes de nada, vamos a ordenar las maletas y todo, por cierto, ¿cuántos días nos quedamos? no se lo he dicho a mi madre aún.
-Tres días, hoy viernes y todo el finde, el domingo por la noche volvemos.
-Vale.
Empiezan a deshacer las maletas, cogen las perchas para colgar los vestidos, las camisetas, lo pantalones y las faldas. En una estantería que hay debajo del armario ponen todos los zapatos y le falta hueco y lo pone debajo de la cama. Deja los cepillos de dientes y su neceser en el cuarto de baño, los geles en la ducha. Todo en su sitio bien ordenado. Ya han terminado.
Enrico saca una bolsa que tiene en la maleta con las velas y un mechero.
-Oye, ¿sabes una cosa que no se de ti?
-¿Cuál?
-Que no se si fumas. ¿Fumas?
-Más o menos.
-Tengo cigarros, ¿quieres?
-Después, vamos a lo que vamos.
Enrico enciende las velas obedece a Andrea al instante, pone unas cuantas en su mesita, otras en la mesita de Andrea y tres en la mesa de enfrente y la demás por el suelo.
-Apaga las luces.
Andrea se acerca lentamente a Enrico. Y lo besa. Dulce. Amable. Tierna. Suave. Ligera. Coge los brazos que Enrico tiene caídos y se los pone al rededor del cuello. Enrico se deja llevar. Y siguen besándose. Ahora con más pasión. Están en medio de la habitación. Se aman. Así con una sonrisa. Una simple sonrisa. Andrea se baja los tirantes del vestido y lo deja caer al suelo. Después salta encima de Enrico con sus bailarinas negras, planas, y se queda así, en bragas y sujetador y nada más. Se echan en la cama.  Sumergida en ese olor a recién lavado de las sábanas, olor a lavanda. Ella, perfumada de sí misma, con la piel oliendo a Sweet and sexy, con los brazos alrededor de su cuello, con unas piernas de músculos largos y bien dibujados y un estómago plano, ligeramente marcado por unos músculos educados que no se muestran en demasía. Andrea, toda aquella naturaleza, sana, como correspondiente a una amante de los estudios. Es el momento de Enrico, y poco después se hallan ya en mar abierto. Bajo una luna, entre una cama deshecha. Noche. Dibujar una caricia los confines de lo que se siente. O intentarlo al menos. Y perderse entre su largo cabello ligeramente suave. Y andar a tientas casi en aquel deseo sofocado, tímido, embarazoso, en aquel sentirse desnudar. Y tener ganas. Tantas. Y seguir adelante así, dejándose llevar por la corriente del placer. Las velas alumbran y son aromáticas. Le dan un toque de aroma a la habitación, con esa mezcla entra las sábanas olor a lavanda y esa colonia de Andrea. Y seguir así, con ese olor que acompaña con dulzura el latido de su corazón. Con los ojos casi cerrados Andrea se pierde en esos aromas que huele todo a él, que le encanta. Sus besos, sus sonrisas, sus caricias, sus largos suspiros y otras muchas cosas más.

-¿Lo estás escuchando?
-¿El qué?
-Que están follando.
-Pues yo no oigo nada.
-Que sí, ¿no oyes los jadeos?
-La verdad es que no.
-Pues estás sorda.
-Ah ya lo oigo, si, estás haciendo eso que tu has dicho.
-No me lo puedo creer. Laura no quería llegar a esto. Pero el plan hay que hacerlo.
-¿Estás seguro?
-Si.
-¿Y si me pillan?
-No te van a pillar
-¿Y si, si?
-No lo se, pero hay que hacerlo que para algo te pago.
-Karl...
-Calla, y vamos a prepararlo todo.

''Todo lo que entra, sale''

jueves, 3 de noviembre de 2011

Capitulo 12

-¿Estás lista?
-Si, un momento ya bajo.
-Vale
-Espérame en la esquina Susanna
-Ja.ja vale amor.
Andrea coge las maletas, le da un beso a su madre y baja a toda prisa.
Abre la puerta y mira a ambos lados y lo ve ahí en la esquina, empieza a correr con las dos maletas en las manos.
-Hola cariño.
-Hola.
-¿Qué tal, ha colado que soy Susanna?
-Claro que si, y menos mal que no me ha dicho de acompañarme. Hablando de Susanna, me ha felicitado a las doce en punto, me ha llamado y yo estaba durmiendo.
-Menos mal, vaya una Susanna. Venga vamos, que perdemos el avión.
Van corriendo al aeropuerto en el coche de Enrico, las tres maletas en el maletero del coche.

Laura está sentada en el coche con Karl, están esperando a ver si llegan Andrea y Enrico.
Laura lleva unas gafas de sol muy oscuras al igual que Karl. Llevan una ropa cómoda, por si acaso.
Ven llegar a Andrea y a Enrico en el Renault. Andrea se baja del coche, luego Enrico, abre el maletero y saca una a una las maletas, se dirijen a la entrada. Poco después cuando ya están dentro bajan ellos del coche, coge las maletas y entran.
Ya se han subido al avión. Andrea y Enrico están unos asientos mas adelante, es imposible que los vea, a no ser que se den la vuelta.
Hay una mujer con un carro que lleva varias comidas, para los pasajeros.
Horas más tarde llegan a Londres.
-¿Estamos en Londres?
-Si.
-¡Cariño, muchas gracias!, que sorpresa.
-De eso se trataba. Vamos al hotel.
Van en un taxi al hotel, esta muy cerca del centro y hay unas vistas alucinantes.
Andrea se queda pasmada al ver el hotel desde fuera. Es de cinco estrellas.
-Si esta es la entrada, a saber como debe de ser por dentro.
-Pues vamos a descubrirlo.
Entran al hotel y el recepcionista se dirije a ellos.
-¿Nombres?
-Andrea y Enrico.
-Señores, esta es la del birthday.
Al recepcionista le cuesta hablar español, esta estudiando para poder mejorarlo. Entran una serie de señores tocando una serie de instrumentos y cantándole cumpleaños feliz a Andrea. Hay un hombre que lleva una tarta de dos pisos en la mano y unas velas arriba con el número 17. Es de merengue y arriba pone. Happy birthday Andrea.
-Muchas felicidades cariño. Pide el deseo que tu quieras, y que se cumpla, no pidas deseos imposibles.
-Muchas gracias mi amor. Me encanta como eres. Y gracias por todo esto. Ya veras mi sorpresa-Le guiña el ojo- Mi deseo se ha echo realidad, así que tendré que pedir uno imposible.
Sopla las velas. Ha pedido su deseo. El recepcionista le entrega la tarta y las llaves. Habitación número 865 en la planta número 8, la planta más alta del piso, para que las vistas se vean bien.

Poco más tarde llegan Laura y Karl. Se dirigen al recepcionista.
-Teníamos una reserva a nombre de Laura López.
-Yes, yes. Room number 866.
-Thank you.
Suben por el ascensor.
-Que sepas que me ha costado una pasta.
-No te quejes que lo hemos pagado entre los dos.
-Aún así me ha costado un ojo de la cara. Y ni mi ojo vale más que este viaje.
-Pues mala suerte.
-Oye, no me hables así, encima que lo hago por ti.
-Perdona, perdona.
-A ver si nos habrán puesto las camas separadas.
-A mi me da igual, si apenas vamos a dormir.
-Pues a mi no me da igual, porque a mi me gusta Franccisco.
-¿Quién ha dicho que te guste yo?
-A, no sé, como te da igual dormir en una cama de matrimonio.
-Me da igual dormir en una de matrimonio o en una individual.
-Vale, vale.

Dejan todo encima de la cama, Andrea se va directamente al baño.
-Cariño, es maravilloso, tiene hasta un secador, y mira que ducha, cabemos los dos, es como la de tu casa.
-Si mi amor, todo tipo de detalle lo he echo por ti.
-Muchísimas gracias, no se que hubiera echo sin ti.
-Creo que nada. Asómate a la terraza.
Andrea obedece al momento, corre las cortinas y abre va ventana.
-Dios que grande. Si tiene unas mesas de madera y todo. Y mira unas galletas, me las voy a comer todas. Es impresionante.
Enrico la coge de la espalda. Y la acerca a la banderilla.
-Ya esta oscureciendo, mira que puesta de sol tan bonita.
-Guau, es alucinante, veo la ciudad entera.
-De eso se trata coger el piso más alto.
-Me encanta Enrico.
-A mi me encantas tú.
-Tu a mi más.
-Sabes que no.
-No seas cabezona, que tu a mi más.
-Yo a ti te quiero más que a nada.
-Yo también cariño mio.

Laura y Karl tienen la oreja pegada a la pared para ver si oyen lo que dicen.
-Quizás están en la terraza.
-Vamos a ver.
Salen a la terraza, ellos también se quedan alucinados por lo grande que es y por las vistas que tienen. Oyen toda la conversación. Cada terraza es separada por un muro y ellos están con la oreja bien pegada. Poco después esta todo en silencio.

''El amor empieza con una mirada, se dice con una palabra, se siente con un beso y se pierde con una lágrima''

lunes, 31 de octubre de 2011

Capitulo 11

Muchas veces me gustaría vivir en un mundo de fantasía, donde hay príncipes, dragones que escupen fuego, seres imaginarios, castillos gigantes, y yo ser la princesa. Tener un vestido echo a medida, de color de rosa largo y de palabra de honor. Con unos zapatitos de cristal con 15 cm de alto, lo nunca visto, todo imaginario. Donde un príncipe con un traje azul con encajes blancos y una espada, venga a salvarme del malvado dragón que quiere matarme. Que esté secuestrada en la cima de la torre más alta del mundo. En un lugar que nadie a visto, o tal vez sí. Que no tenga comida, ni agua ni un lugar para dormir. Pero sé que mi príncipe azul, esta viniendo a salvarme, que algún día me encontrara, que matará por fin al enano que me secuestra y su malvado dragón. Y si algún día llega, que ese príncipe no me deje nunca ser secuestrada otra vez por el enano y su dragón.

Andrea está leyendo las páginas de su diario, acaba de llegar de la casa de Enrico, le ha traído en coche.
Sigue leyendo su diario.

No se trata de ir por la vida con una sonrisa de oreja a oreja para demostrar que soy feliz.  Se trata de reír sin darme cuenta, de soñar despierta y no acordarme después, de jugar con fuego, quemarme, y aún así reír, porque es lo único que puedo hacer, esa sonrisa que se convierte en carcajada en menos de un segundo, y que más tarde llegará a formar parte de esos momento irrepetibles que componen mi felicidad.

Andrea pasa una página, es cuando corto con Karl. Lo lee muy atenta.

Eres un gilipollas. Eres un malvado inútil, solo sabes hacer daño, eres un parásito que vives la vida pensando que es una guerra. Como esos que dicen ''cuantos más amigos, más honor''. Pero, ¿sabes una cosa? Para hacerse un enemigo no se necesita nada. Mejor dicho, hasta es fácil... Basta con ser un lelo, como tú. En cambio, el verdadero honor estriba en saber hacerse un amigo. Tienes que querer, ser querido, currártelo, ser leal, ser amado... y eso es mucho más difícil, más trabajoso. Pero también más hermoso.

Andrea se queda muy sorprendida, recuerda esos momento de ternura, esos momentos de felicidad, esos momentos que no quería que se acabaran nunca, esos momentos en los que decía <<Haces que lo imposible sea posible>> Ese momento de arrepentimiento cuando me besé con su mejor amigo. Esos recuerdos cuando me pegó, cuando no quería saber nada más de él. Cuando recuerda esos momentos llora, llora tal vez de tristeza por haber dejado la relación, o tal vez de felicidad, por esos momentos pasados y por estar con Enrico. No pensando en nadie más, lo quiere, le da todo lo que necesita; felicidad.

Laura esta leyendo el mensaje que le acaba de enviar Franccisco.
''Los celos conservan el amor, igual que las cenizas guardan el fuego. PD: Te quiero''
Cuando quedaron hablaron de muchas cosas, de lo felices que son, de lo mucho que se quieren, y que no lo volverán a dejar a no ser que a alguien le pase algo, y que mejor que no ocurra así.
Tomaron un helado, lo compartían como una pareja normal, como si nunca hubiese ocurrido algo.
Ella le contó lo mal que lo ha estado pasando estos días, él igual. No podían vivir el uno sin el otro.
Se tiraron largo tiempo hablando, del tiempo, del color que hacia, de lo que iban a hacer después.
Ella se saco del bolso un anillo. Y le dijo.
-Mira en este anillo pone ''For'' y en este otro pone ''Ever''. Elige el que más te guste.
Él eligió ''for'' por lo cual ella se quedo con ''ever''.
-Para cada vez que lo veas te acuerdes de estos momentos juntos y de mí.
Es de plata, grabado con una caligrafía a máquina. No le ha costado ni muy caro ni muy barato. Se decidió por ese porque cuando empezaron a salir le regaló un collar de plata más o menos como este que ponía grabado ''For ever''. Y que mejor regalo que un anillo que ponga lo mismo que hace tres meses y medio, y que lo puedan llevar los dos.

''Cada beso, cada caricia, es una montaña rusa de emociones que fluyen por mí''



domingo, 30 de octubre de 2011

Capitulo 10

Tal vez lloré demasiadas veces, tal vez mis lágrimas no sirvieron de nada, pero no me arrepiento de haber llorado, porque cada lágrima 1000 sentimientos expresé. No soy débil por llorar, al contrario, mis lágrimas me han echo más fuerte y ganarle esta guerra a la adversidad.
Siempre estuviste ahí, pero sé que algún día no estarás, pero aún seguirás siendo mi espada tras cada batalla.
Nunca me arrepentí de estar contigo, siempre te he querido y siempre te querré, porque esta batalla sé que la ganaré, porque lo eres todo para mí, sé que en este momento estás pensando en mí, sé que se va a arreglar todo de un momento a otro. Sé que me quieres.
Y si algo tengo claro, es que tu estés o no estés, serás mi espada, tras cada batalla, porque sufriendo me haré más fuerte.
Quiero que confíes en mí igual que yo en ti, y me puedes llamas criaja, imbécil, todo lo que tu quieras, llorando te demuestro todo lo que te quiero y lo que me importas.
Te lo escribo en esta carta, porque tengo miedo a que me evites, llevamos tres y medio y no sé lo que va a pasar sin estar juntos, te quiero con todas mis fuerzas. Y espero estar siempre contigo.

Laura. Te quiero, perdóname.

Franccisco la ha leído, tiene los ojos llorosos, los cabellos de punta. Quiere arreglar las cosas, ella es su media naranja, su medio corazón, su media vida.
Le manda un mensaje. ''A las 8 y 15, en la puerta del Café club. No me falles.''
Enviado. Laura lo lee, no se lo puede creer, se emociona, se excita. ''Vale. PD: Te quiero''

Andrea ha salido del instituto. Enrico le está esperando en la puerta.
-¡Cariño!
-Hola Andrea- Se besan.
-¿Qué haces aquí?
-¿Tu que crees?
-Que me vienes a recoger.
-Exacto, llama a tu madre que te quedas a comer en casa de Susanna
-Ja,ja, como siempre, ¿no?
-A ver cuando vas a tener tiempo para mí, siempre estás con ella.
-Tonto.
Se suben en el coche.
-¿Qué tal en clase?
-Fatal, he sacado un 5 en lengua.
-Tampoco está tan mal, por lo menos has aprobado.
-Pero a mi me gusta sacar mejores notas, y estudié un montón.
-No pasa nada, para la próxima verás como sacas un 10
-Si, ¿te has vuelto adivino?
-Por supuesto, si sacas un 10 me invitas a un café, si no, pago yo.
-Me parece bien, el próximo lo tengo la semana que viene.
-Pues ya puedes estar esfordandote mucho, que no quiero pagar yo.
-Vale, vale.
-Ok.
-¿Dónde vamos?
-A comer.
-¿Y luego?
-A comprar.
-¿Y después?
-A mi casa.
-Vale.

Llegan al café bar Marengo. Ponen exquisitas tapas típicas españolas.
Ella se pide una berenjena rellena y una coca-cola, él ternera en salsa y una cerveza.
Hablan de todo, critican a los de al lado, escuchan conversaciones de otras personas que ni saben quienes son, hablan de sus cosas, de lo que van ha hacer en el viaje, Enrico no se quiere dar el mínimo detalle, Andrea insiste, pero él la ignora, Andrea se enfada, y él sigue ignorándola.
Minutos más tarde piden la cuenta y se van.
-Bueno, quiero que te lleves el vestido que te compre para una cena, el mismo día de tu cumpleaños.
-Ya esta en la maleta- Le guiña el ojo
-Me parece muy bien, sabía que ya lo tenias.
-Hola señor adivino, encantada.
-Encantado con mucho gusto.
Se ríen, se burlan de ellos mismos, se lo pasan genial, le encanta estar uno al lado del otro, compartiendo momentos, descubriendo cosas que desconocían. Se quieren.

''Es un proceso rápido e intenso, no te voy a decir que pienses en todo lo que vayas ha hacer y sobre todo que seas tu mismo''


viernes, 28 de octubre de 2011

Capitulo 9

-Un átomo es la unidad más pequeña de un elemento químico, que mantiene su densidad y que no es posible dividir mediante procesos químicos.
Andrea esta en clase de Biología, no esta atenta, está pensando en Enrico, en lo mucho que le quiere, pensando a donde le va a llevar;-Tengo que hacerle un detalle, un regalo, algo que le haga mucha ilusión y que se acuerde de mi cuando lo vea, que no sea la típica colonia de siempre, tiene que ser algo mágico, algo bonito, que le guste, que le haga sonreír, que nadie lo tenga. Quizás, si no le regalo nada, me deje, yo no quiero perderle, tengo miedo a perderle, pero no Andrea, el miedo se disfraza de tu amigo, así que no le des la mano, plántale cara, y mírale a los ojos, combate con él y así no te llevará consigo, y encerrarte en tu casa por miedo, miedo ¿a qué? seguramente me querrá, me lo demuestra, tiene ganas de verme día a día, yo por mi parte sí, supongo que por la suya también. Bueno, Andrea no te ralles.
-El átomo tiene dos partes, el núcleo y la corteza.
Ella sigue pensando en sus cosas, cree que ya sabe lo que le va a regalar.
Suena el timbre. El profesor manda la página entera de ejercicios.
-¡Andrea!
-Susanna, no grites, casi me revientas los tímpanos.
-No seas tan exagerada.
-No soy exagerada, digo la verdad.
-Bueno, y ¿dónde te va a llevar Enrico por tu cumpleaños?
-No lo sé, es una sorpresa.
-Jo, y yo que te quería invitar a un café.
-No compares un café con un viaje.
-Si no sabes donde te va a llevar no sabes si es mejor un café o no.
-Va a ser mejor porque voy con el hombre al que quiero.
-Pero es más especial estar conmigo.
-Ya, si a ti te conozco de los tres años, es mas, desde que nacimos diría yo. Pero es que él lo tiene todo.
-Yo también, soy perfecta.
-Nadie es perfecto y no seas tan creída mujer.
-Sabes que me gusta serlo.
-Normal.
-Oye, no me podéis dejar aquí tirada el día de tu cumpleaños, así que ahora mismo voy a sacarme un billete para ir con vosotros.
-Ni de coña, como lo saques, ya no te cuento lo que vamos a hacer.
-¿Ni que vais a follar?
-No, nada, de nada.
-Vale, vale, no voy, pero me lo tienes que contar todo hasta el último detalle.
-Claro.

Enrico está haciendo la maleta; -Madre mía, ya estamos a diez de junio, faltan cinco días para el viaje, tengo una ganas tremendas de ir, de verla sonreír,  de darle mil y un detalles.
Se va al ordenador para mirar restaurantes, lugares, tiendas; para llevarla, para que se sienta como una reina.

Laura y Franccisco están discutiendo.
-¡No te vayas!
-Que hablar, me voy porque es un viaje de negocios.
-Pero es que no pasamos nada de tiempo juntos y encima vas con tu jefe.
-Bueno, cuando termine esta investigación pasaré muchos días contigo.
-Si, ya.
-Pero, ¿tu me ves capaz de liarme o de ponerte los cuernos, que viene a ser lo mismo, de liarme con mi jefe?
-No lo sé, no te conozco lo suficiente.
-Me conoces lo suficiente como para saber que te quiero a ti, y solo tengo ojos para ti.
-Llevamos tres meses y medio juntos y todavía no se nada de ti.
-Sabes demasiadas cosas que nadie sabe.
-¿Color?
-Rojo.
-¿Animal?
-Gato y lince.
-¿Serie?
-Los protegidos.
-¿Tu madre?
-Mari.
-¿Tu padre?
-Jose.
-Bueno, y muchas mas cosas que no se de ti.
-Yo tampoco se muchas cosas de ti, pero como ves yo no me quejo.
-Esta relación, cae empicado para abajo y sin frenos.
 Laura empieza a llorar, recuerda esos momentos juntos, llenos de felicidad y lo mucho que le quiere.
-Llorar no te va a proteger.
-Pero me voy a sentir mejor.
-Sabes que no.
-Mira Franccisco, no quiero ejércitos, ni una espada para poder luchar, solo quiero a alguien que me proteja de la adversidad, del frío y de las personas que quieran hacerme daño.
-¿Y qué estoy haciendo hasta ahora?
-Todo eso, pero no confías en mi y no me quieres.
-¿Quién ha dicho que no te quiera?
-Me lo estás demostrando.
-La que lo demuestra eres tú.
-Franccisco te quiero mucho, y no tengo ganas de discutir.
Y se va sin más.

¿Sabes? Aun que no te lo haya dicho, la mirada es lo que hace diferente a cada persona.
Firmado: La chica que ya ha hecho la maleta.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Capitulo 8

-Valeria, ¿ya estás aquí?
-Si hermanito, tengo derecho ha hacerte una visita, así que no te quejes.
-Si, pero no tantas veces a la semana.
-Encima que me he dado un viaje para venir...
-Pero es que yo no te he dicho que vengas.
-Ya lo sé, me gusta más dar la sorpresa. ¿Estás con Andrea?
-No, me gusta más que me avises, ¿Y si no estoy? y no, no está.
-Pues si no estás vengo por el mismo camino pero al revés, vengo por donde he venido y fácil. Ya, hermanito, ¿a quién vas a engañar?, huele a ''sweet and sexy'' y eso es colonia de chica.
-Si, me parece bien, vuelve por el camino que has venido y deja el interrogatorio para otro momento.
-Hermanito, no me lo puedo creer, ¿me estás echando?, ¿a mi?, ¿a tu propia hermana?; ya verás cuando se lo cuente a mamá. Y mira, no me has negado que esta aquí tu novia.
-Ni tampoco te lo he afirmado. Y te estoy echando, si, a mi propia hermana.
-¿Pero que estás haciendo como para echarme?
-Estoy corrigiendo las fichas de educación física, y si eres tan amable de irte, me harías un gran favor.
-Bueno me iré, primero se lo voy a contar todo a mamá y segundo volveré mas tarde que lo sepas.
-Vale, gracias por avisar, así no te abriré la puerta. Adió Valeria.
Le cierra la puerta en las narices, Valeria se queda pasmada mirando a la puerta, luego recupera su estado y se va.
Enrico va a su cuarto y abre el armario.
-Ya puedes salir.
Andrea sale de su armario.
-Dios, tu hermana tiene un olfato estupendo.
-¿Te has echado ''sweet and sexy''?
-Si. ja,ja, que buen olfato.
-Y muy buena lengua.
-Eso no te lo niego, habla demasiado.
-Y es muy pesada.
-¿Por qué no le has dicho que estabas conmigo?
-¿Para qué?, ¿para que te busque por toda la casa?, ¿para que no se valla en la vida?, ¿para que sea mas pesada aún?, he echo bien en no decírselo.
-Mirándolo de ese modo, tienes razón.
-Claro que la tengo, siempre la tengo.
-Sobre lo de antes, ¿cómo que tiene buena lengua?, ¿no te gusta la mía?
-La tuya es la mas perfecta de todas.
-Ah, ¿para que me has llamado?
-Estamos a 1 de Junio, el día 15 es tu cumpleaños, y prefiero decírtelo ahora que no al día de tu cumpleaños.
-Dímelo.
-Tengo una sorpresa que te va a encantar, ya esta todo listo, la parte del plan. es que hagas las maletas que nos vamos a un lugar muy bonito, y que no se te olvide de decirle a tu madre que vas con Susanna.
-¡En serio! ¿dónde vamos a ir?
-Ya te he dicho que es una sorpresa. Tienes que decirle a Susanna que te cubra.
-Vale, voy a buscarla, ¿pero ella viene?
-¿Estás de broma?
-Si, no te asustes; ja,ja
-Andrea y sus bromas. ¿No es mejor que la llames al móvil?
-Me he quedado otra vez sin saldo con los mensajitos.
-No, mira el saldo.
Andrea marca las teclas para ver el saldo; 30 euros.
-Enrico que has echo?, ¿me has metido 30 euros?, ¿estás loco?
-Espero que estos 30 euros te los gastes poco a poco.
Andrea llama a Susanna. Lo coge al tercer toque.
-¡Hola Andrea!
-Susanna...
-Dime.
-Me podrías hacer un favor?
-Depende, dime
-Enrico me va ha hacer una sorpresa para mi cumpleaños, y me ha dicho que haga las maletas, va a ser el día de mi cumpleaños, y como no tengo una mejor amiga como tu, he pensado que me podrías cubrir.
-Ni de coña.
-Susanna, por favor, que eres la única en la que puedo confiar y a la que se lo puedo pedir.
-Bueno, pero me tienes que contestar a una pregunta.
-Claro, claro, dime.
-¿Te lo has follado ya?
-No.
-No te creo.
-No, no me lo he follado, pero en el viaje ya se verá.
-¿Enserio? entonces vale, te cubro.
Enrico lo está oyendo todo se está quedando pasmado con la conversación. Andrea cuelga el móvil.
-Lo he oído todo.
-Te voy a regalar un león para que te lo lleves al viaje, no, mejor, una gata salvaje.
-Estoy deseando que llegue el 15.
-No sabes las ganas que tengo yo.



lunes, 24 de octubre de 2011

Capitulo 7

Laura está en casa de Karl.
Tiene todas las fotos encima de la mesa. Las ve una a una, muy lentamente, mirando cada tipo de detalles, los bese, regalos, sitios...
Ve una foto rara, Enrico saliendo de una agencia de viajes.
-Escanea esta foto.
Laura obedece, la escanea.
-Acercala y lee lo que pone en los billetes.
-Reino Unido... Londres... Vuelo de las ocho, día 15 de Junio.
-Su cumpleaños. Y tiene dos billetes; Laura, consigue dos billetes, vamos ha hacer un viajecito.
-¿Y qué le digo a mi novio?
-Que es un viaje de negocios.
Karl sigue mirando las fotos. Ve una que no le gusta nada, él debajo de Andrea quitandole la camiseta. La fecha es de ayer por la tarde. Se queda sorprendido, no quiere pensar lo que han echo después de esa foto, pero lo piensa.
-Laura, ¿qué hicieron después de esa foto?
-Nada vino su madre y se tuvieron que ir.
-¿Su madre sabe que está con él?
-No, porque se escondió para que no lo viese.
-Vale, si hacen algo más, me avisas.
-Claro jefe.
Guardan todas las fotos, Karl las guarda en una caja fuerte, la contraseña es el día que salieron. No la ha olvidado, la recuerda todos los días, las noches, las mañanas, a todas horas, todo el tiempo.
-Adiós, me voy a por los billetes.
-Investiga sobre el hotel donde se van alojar y cuantos días se quedan.
-Si, jefe.
Laura se va, se direije a la agencia.  Hay mucha gente por la calle. Quince minutos después esta dentro.
Habla con la muchacha que esta sentada en un asiendo de ruedas azul.
Sale de la agencia, ya ha comprado todos los billetes, ha puesto todos sus datos, van en el mismo avión. Por la acera del frente ve como para Enrico con una mochila. Entra en un colegio. Laura mira su relog. Enrico entra a trabajar. Echa una foto antes de que entre y lo pierda de vista.
Laura llega a su casa.
-Fraccisco, ¿estás en casa?
-Si, hola mi amor- La besa.
-Hola cariño, espera voy al baño.
Franccisco ve como se marcha, empieza a sacar cosas del bolso; pintalabios, el monedero, el móvil, su agenda. Abre la agenda y ve que hay unos billetes sueltos, son del viaje a Londres. Laura vuelve del baño.
-¿Qué son estos billetes?
-¿Me estás registrando?
-He preguntado yo antes.
-Voy ha hacer un viaje con mi jefe.
-¿Para qué?
-Porque a la gente que estoy espiando se van a Londres, y me jefe me a dicho que vallamos. Lo primero que he hecho a sido pensar en ti.
-¿Me estás engañando con tu jefe?
-No, cariño, yo te quiero a ti y a nadie más, mi jefe es muy feo, me gustas tú.
-¿Puedo ir?
-No creo que vayas a soportar nuestro ritmo.
-Bueno, pero que para la próxima, dime antes de que me entere yo que te vas.
-Es que no me ha dado tiempo.

domingo, 23 de octubre de 2011

Capitulo 6

Bip, bip. Andrea sigue durmiendo, nota como vibra el móvil. Lo coge, le da a desbloquear; un mensaje nuevo. Lo lee. ''Buenos días princesa, ¿estás preparada para escaparte?, por lo menos creo que estaremos 5 horas fuera, así que dile a tu madre que vas a comprar el pan, y luego como si hubieras ido a por tabaco, 5 horas no son nada, no se van a dar ni cuenta''
Responde. ''Ja,ja que gracioso que eres cariño, ¿a qué hora vas a estar en la puerta de mi casa? ;)''
Enviado. ''Sobre las 4, así que hay que estar ya lista para esa hora, si te llama estas en casa de Susanna como siempre''
Le llega, no quiere responder, no tiene ganas. Baja a la primera planta de su casa, tiene el desayuno encima de la mesa, chocolate caliente y churros. Le encantas. No hay nadie en su casa, sus padres se han ido. Se sienta y coge un churro, lo moja en el chocolate, se lo mete en la boca y le caen gotas de chocolate por la barbilla, coge una servilleta al momento y se limpia.
Se levanta para coger agua fría del frigorífico, hay una nota pegada la coge y la lee:
''Andrea, nos hemos ido tu padre y yo a dar una vuelta, llegaremos por la noche, cumple con tu castigo y nada de llevar a gente a la casa.''
Coge de momento el móvil y escribe. ''Enrico, cambio de planes, ya no me escapo, mis padres se han ido y tiene emoción eso de escarpase, así que a las 4 te quiero ver en mi casa. Un beso cariño, no hace que respondas, es una orden.''
Enrico lo lee y obedece. Enrico esta haciendo la cama, ya a desayunado y a limpiado un poco. Un domingo por la mañana no hay ninguna tienda abierta para regalarle un detalle. Se viste, coge cualquier cosa, un baquero pirata, tipo Bermuda y una camiseta de rayas azules y blancas, con los tenis azules.
Son las doce de la mañana y se va a comprar el pan. Media hora después llega a la panificadora, esta bastante lejos de su casa, pero mejor así, mas ejercicio. -Iré también a comprar la comida- piensa.
Pide una barra y dos medias lunas para la tarde con Andrea, ya que no le puede comprar un detalle.
Todo le cuenta dos con cincuenta. Al lado de la panificadora hay una tienda de comida para llevar. Entra. No hay mucha gente. Pide un cocido para uno y caracoles recién echos. Todo 4 euros. Sale de la tienda y se dirige a su casa.
Andrea ya a terminado de desayunar y se esta poniendo la ropa, una minifalda vaquera y un body negro, ya que esta delgada le queda bien; y unas sandalias negras de verano. No sabe que hacer, ya que sus padres no están, se hace la comida, huevos fritos con patatas.
Enrico llega a su casa, son las dos, a llegado justo cuando empiezan los Simpsons. Pone la mesa, un mantel rojo de tela;  tenedor, una cuchara, un vaso y una coca-cola. Calienta un poco el cocido que se ha enfriado por el camino, luego los caracoles; echa cada cosa en un plato diferente y lo lleva para la mesa del comedor.
Andrea, echa el aceite en la salten, echa el huevo; en la freidora echa el aceite y las patatas. Cinco minutos después ya esta echo todo, la mesa la a puesto antes y se pone a comer; en la tele los Simpsons.
Terminan de quitar la mesa. Andrea se ducha y se pone la misma ropa. Enrico, también se ducha, pero se cambia de ropa, se pone una camiseta pegada, marcando de todo, y unos pantalones largos con unos zapatos de vestir.
Enrico, baja al garaje, le da al botón de la puerta automática, se sube al coche, arranca, lo saca, aprieta el botón y se va.
Andrea lo esta esperando en el sofá.
Rin. Tocan a la puerta. Abre
-¡Hola mi amor!, te estaba esperando.
-Hola cariño, ¿has esperado mucho?
-No, pero tenia muchas ganas.
-Y yo de verte mi vida.
-Entra anda.
Entran en la casa, Enrico lleva los pasteles en la mano y los deja encima de la cocina, donde le ha indicado Andrea.
-A ver Enrico, que tu no has visto mi casa. Este es el salón, aquello de allí la cocina, esto de aquí es el comedor; y al fondo está el baño, es el más pequeño.
-Esta bastante bien, y es muy bonita.
-No mientas, mi madre tiene el gusto en el culo. Mira, vamos a subir a la planta de arriba.
-Vale.
-Este es el  cuarto del ordenador y de estudiar, aquí paso el mayor tiempo.
-Si, y en casa de Susanna.
-Ja, ja que gracioso. Mira, este es el cuarto de mis padres, como ves cada cosa en su sitio, bien ordenado...
-Muy bonito.
-También lo ha decorado mi madre. Este es mi cuarto. Este por el contrario lo he decorado yo, como lo tenia antes era horrible, lo había decorado mi madre.
-Este es el que mas me gusta de todos.
Entran en su cuarto, le enseña cada detalle, cada cajón, el armario, las estanterías...
Al final, quién sabe como acaban los dos en la cama con la puerta cerrada, uno encima del otro, besándose con ganas, con deseo, con ganas de hacerlo...
-Quitamelo todo.
-¿Estas segura?
-Si, no seas aguafiestas.
-Vale, vale.
Le quita la falda, le quita el body; ella le quita la camiseta pegada, los pantalones largos. Le quita el sujetador, y las bragas; ella a el los Jacks Jones.
-Andrea, ya estamos en casa, hemos llegado un poco antes, porque tu padre se ha aburrido.
Enrico la mira con cara de preocupación.
-Oh no, mis padres, venga corre vístete.
Andrea se pone el albornoz mojado que se había dejado encima de su tocador.
-Hola mama, me iba a duchar.
-Ah vale, me pensaba que no estabas como no has contestado.
-Estaba en mi cuarto prepando la ropa para ponérmela ahora.
-Vale, venga dúchate, nosotros estamos aquí en el salón. Nos vamos a ir a casa de los abuelos, así que no tardes.
-Vale mama.
Vuelve a entrar en el cuarto, Enrico ya esta vestido.
-Enrico, me ha dicho mi madre que ahora nos vamos a la casa de mis abuelos, así que te tendrás que esperar un poco, me tengo que volver a duchar, cuando nos vayamos te puedes ir.
-Madre mía. Vale, a ver si me pillan aquí en tu cama, que pensaran de mi.
-No te van a pillar, tranquilo, bueno ya sabes lo que te he dicho.
Andrea se ducha. Se viste y se peina. Baja las escaleras corriendo.
-Ya estoy lista, nos podemos ir.
-Vale, has tardado muy poco.
Salen, nunca echan la puerta.
Enrico sale de su habitación, baja las escaleras y se va.



sábado, 22 de octubre de 2011

Capitulo 5

Las dos de la mañana. Andrea llega a casa, no ha pensado ni un segundo que su madre le tiene dicho que llegue antes de las doce; pero ha estado más pendiente de la fiesta que de su madre.
Introduce la llave en la cerradura y gira a la izquierda, se abre al momento. Entra están todas las luces apagadas, -Estarán durmiendo- piensa. Se quita los tacones sin hacer nada de ruido, recorre todo el pasillo de puntillas, para hacer el mínimo de ruido. Abre la puerta de su habitación, enciende la luz.
Su madre está sentada en su cama, está muy enfadada.
-¿Dónde has estado?
-Con Susanna.
-He dicho donde, no con quien.
-En una fiesta.
-¿Quién te ha comprado ese vestido y esos zapatos?
-Me lo ha dejado Susanna.
-¿Dónde era la fiesta?
-Mamá, no quiero hablar de ello, tengo demasiado sueño, hablamos mañana por favor.
-No, te lo estoy preguntado ahora, y te tengo dicho que vengas antes de las doce.
-Me tenía que haber quedado a dormir en cada de Susanna.
-Me tienes que avisar a que hora llegaras, donde dormirás y donde estas, Andrea, yo me preocupo mucho por ti, no se si te ha pasado algo, si te han violado, y no me gustaría que pasara nada de eso.
-Vale mamá, para la próxima te aviso, pero por favor déjame dormir que estoy muy cansada.
-Venga duerme. Pero que sepas que estas mañana castigada.
-No mamá por favor no.
-Si.
La madre se va dando un portazo. Andrea se empieza a quitar la ropa y se pone el pijama; cuelga el vestido en el armario y los zapatos los mete debajo de la cama, el bolso en la estanteria. 
Coge el móvil. ''Lo siento cariño, mañana no se si podremos quedar, me han castigado por llegar tarde''
Bip, bip; Enrico coge el móvil, en la bandeja de entrada pone que tiene un mensaje nuevo. Lo lee y sonríe para sí. Escribe. ''Me parece muy bonito eso de que llegues tarde, ¿que habrás estado haciendo? ;) tienes que hacer una cosa maligna, escápate.'' Enviado.
Andrea lo lee se ríe exageradamente. Pero se calla al momento. Responde. ''Me parece bien ese plan, ja,ja. Te quiero, y sueña con los angelitos''.
Enrico lo lee y sigue sonriendo, piensa en ella, la quiere. No responde.
Se acuestan los dos, cada uno en su cama, a varios kilómetros de distancia, con muebles diferentes, pijamas diferentes; todo es diferente.

Laura esta con Franccisco en la cama.
-Oye cariño, ¿por qué apenas estás en casa? te vas muy temprano y llegas muy tarde.
-¿Estás celoso?
-No, pero es que me preocupas, ¿te pasa algo conmigo?
-No mi amor, pero ya sabes que tengo mucho trabajo y ese esfuerzo hace que gane bastante dinero.
-Ganas menos que los funcionarios.
-Ya, ya quisiera yo ser funcionaria, pero que va, me dolería el culo de estar todo el día sentada-Se ríe
-Pero cariño, no me gusta que trabajes tanto, a penas hay tiempo para nosotros, esto parece mas bien una relación a distancia.
-No te preocupes, ya sabes que yo voy de trabajo en trabajo, pero este es muy importante y será el que mas dinero gane.
-¿De qué trabajas? si no se sabe eso en una relación vamos mal.
-Investigo casos de personas.
-¿ Espía?, ¿cómo en las pelis?
-Más o menos, no tan exagerado como en las películas.
-Y, ¿A quién espías?
-No se puede decir. Si tu vas a cada persona diciendo a quien espías, llegaran un momento que esa gente se entere, y eso no lo pueden saber, porque si no pierdo yo el trabajo y no me pagan y me llevaría una bronca muy grande.
-Ah vale, pero a mi no me espíes, que nos conocemos.
-No, estate tranquilo que a ti no te espío- Le sonríe
Se besan, él le quita la camiseta, ella se la quita a él; se quitan los pantalones, se siguen besando. Se lo quitan todo. Ella está encima de él, rápido, muy rápido. Placer, mucho placer.
-Te quiero Franccisco.


viernes, 21 de octubre de 2011

Capitulo 4

Llegan a casa de Enrico, son las ocho y tienen que ir a la fiesta a la diez.
Andrea saca el vestido de la bolsa, lo cuelga en el pomo de la puerta. Se va a la cocina y se echa un vaso de agua fría, se lo bebe al tirón.
Enrico esta en su habitación preparando la ropa para esa noche. Se quita la ropa para ir a la ducha.
Ella está en el baño en el jacuzzi. Enrico no se da cuenta y entra en el baño.
-Perdón no me e dado cuenta, me voy- Hace ademán de irse.
-Espera da igual, vente conmigo.
Se mete con ella en el jacuzzi los dos desnudos, frescos.
-¿Te hago un masaje?- Le guiña el ojo
-No, yo a ti.
Enrico se pone detrás de ella, le empieza a masajear el cuello, suave, muy suave, las manos llenas de espuma del agua, calientes. Baja las manos hasta los hombros, los masajea; Andrea esta relajada, le gusta.
Rin. Tocan al timbre.
-Que oportunos.
Enrico se pone el albornoz , sale del baño, dejando huellas de jabón por todo el pasillo. Abre la puerta.
-Enrico, cariño, ¿cómo estás?
-Valeria, ¿qué haces aquí?
-He venido ha hacer una sorpresa a mi maravilloso hermano, o es que no puedo?- le guiña el ojo
-Pues no, tienes que avisarme.
-¿Por qué, estás con tu novia?, quiero verla
Y entra en la casa con prisa, se queda parada en el salón.
-¿Dónde está? No la veo.
-Está duchándose.
-Si tienes el albornoz puesto, ¿os habéis bañado juntos en pillin?
-Valeria, no empieces. Ahora saldrá.
-Vale, hermanito, ¿me puedes traer un zumo de piña?
-Hermanita, ¿me puedes dejar que me cambie por lo menos?
-Claro, claro, ya lo cojo yo, lo he pillado.
-Vale cógelo tú, voy a estar en mi cuarto cambiándome, si sale Andrea se lo dices.
-Claro que si hermanito.
Se va Enrico, Valeria coge un vaso y busca el zumo en el frigorífico.
Andrea está tranquila en el baño pero ya se ha hecho muy tarde y decide salir de la ducha. Sale, se pone el albornoz se seca los pies y se pone una toalla en el pelo, para secar sus cabellos rubios.
Se dirige al salón y no está Enrico, no lo ve, no sabe donde está. Se va a la cocina. Se encuentra con Valeria.
-Hola, ¿quién eres tú?
-Buenas, soy Valeria, la hermana de Enrico.
-Encantada, yo soy Andrea su novia.
-Enrico me ha dicho que te diga que está en su cuarto- Le guiña el ojo.
-Vale, voy para allá que las pintas que llevo no son las adecuadas.
Va para el cuarto de Enrico pero antes coge el vestido para ya ponérselo, son las nueve y media.
-Enrico son las nueve y media- Abre la puerta de golpe y se asusta
-Me has asustado, me pensaba que eras mi hermana.
-¿Tanto nos parecemos?- Y hace poses como las modelos.
-No, tu eres mucho más preciosa, que ese bicho que hay en la cocina.
-Te quiero.
Se visten, ella se peina, ya están listos. Son las diez menos cuarto. Han quedado como Barbie y Ken.
-Valeria nos tenemos que ir.
-¿Ya os vais?, pero si no hemos hablado nada, me tenéis que contar todo.
-No hay nada que contar, no hemos hecho nada.
-Pero si estabais metidos los dos juntos en el baño, como para no hacer nada.
-Pues no hemos hecho nada así que venga vete que nos tenemos que ir, además mamá te estara esperando, la llamaré para decirle que ahora llegarás.
-No, se supone que yo estoy en casa de María del Mar. Así que me temo que tendré que pasar aqui la noche.
-No, no puedes Valeria, nos tenemos que ir. Así que vamos que te llevo yo.
-Jo...
 Se van, la dejan en la puerta de su casa.
-Adiós hermanito, adiós cuñadita. Que os lo paséis bien en esa fiesta y no bebáis mucho alcohol.
-Que si, que si, Valeria venga vete ya.
Arranca el coche de nuevo y salen disparados, Valeria entra en su casa y se lo cuenta todo a su madre.
-Vaya hermana más simpática, cuñadita.
-No le hagas caso solo tiene quince años.
-Perdona que te diga y te recuerde, yo solo dieciséis.
-Pero tu eres más madura que esa niña pequeña de mamá y de papá.
-Ya, pero aún así sigo teniendo dieciséis años.
-Bueno, ya, pero yo te quiero tal y como eres, no me importa tu edad.
Llegan a la fiesta, hay un señor en la entrada. Un aparca coches. Enrico le da las llaves.
Entran al restaurante, hay un ambiente agradable, muchos señores de gran edad y otro muy jóvenes.
-No me lo puedo creer, es Susanna.
-¿Quién es esa?
-Enrico, ¿no te acuerdas?, aquella chica morena muy delgada y alta, que estaba conmigo cuando nos conocimos.
-Ah, es verdad, aquella chica.
-¡SUSANNA!
-Sh, Andrea, aquí no se puede chillar.
-¿Qué haces tu aquí?
-Pues que he venido con Paula, que la pobre se ha aburrido de estar con su madre, ¿y tú qué?.
-Me ha traído Enrico que quiere estar conmigo.
-¡Qué vestido tan precioso!
-Gracias, me lo ha regalado Enrico.
-Joder que chico tan detallista...
-Pues si, es muy encantador.
-Me alegro mucho de que seas feliz por fin.
-Muchas gracias Susanna, ojalá que encuentres tú a alguien como Enrico.
-Como él hay pocos, la verdad.
-Pues parecidos. Bueno me voy que Enrico esta cogiendo mesa. Te quiero.
-Vale Andrea, luego hablamos.
-Claro.

Laura. Está en su estudio, revisa las fotos que hizo el día anterior, lo tiene todo en orden, fechas, horas, minutos, segundos, momentos, lugares. Llama a Karl.
-Todo en orden.
-Bien hecho Laura.

jueves, 20 de octubre de 2011

Capitulo 3

Laura, amiga de Karl, amigos desde la infancia. Esta hablando por teléfono con Karl, junto a ella está su novio Fraccisco, ya tres meses de noviazgo. Karl le encarga un trabajo a Laura para esta tarde.
Ella, esta de acuerdo con él, ya sabe todas las direcciones, ya está lista para hacer su trabajo.
Laura besa a Franccisco, se pone sus Ray Ban y se va directa, andando con esas curvas, su pelo no muy largo pero que por el viento se le mueve; se sube en el coche y se prepara para la ``misión´´. Se pinta los labios rojos, se hecha un poco de Rimmel y un poco de colorete. Arranca y sale a toda velocidad.

Andrea sale del instituto y Enrico le esta esperando en la puerta de su coche.
-Hola Enrico, ¿qué haces aquí?
-Quiero llevarte a un sitio.
-¿Dónde?, dímelo
-A un sitio, es una sorpresa, te vas a tener que quedar con la intriga, sube al coche.
Se suben en el coche, ella sonríe, le gustan las sorpresas, lleva todo el camino preguntando que donde van, divertida, nunca pierde la sonrisa.
Unos minutos mas tarde llegan. Es una tienda muy cara en el centro; en el escaparate se ve unos vestidos muy largos, otros cortos; con volantes, lisos, estampados; de rayas, de leopardo...
-Mira, ven.
-¿Dónde me llevas?
Entran en la tienda. Es grande, demasiado. Hay tres dependientas todas con el pelo recogido y con el mismo uniforme.
-Elige el vestido que mas te gusta, también los zapatos que quieras, si quieres amor, puedes coger algún complemento que te guste. Esta noche vamos a una fiesta elegante, de esas en plan ``Dolce y Gabanna´´
-Oh, que detalle Enrico, pero si esta tienda es muy cara y apenas tengo dinero
-No pasa nada, si no lo vas a pagar tú, este regalo te lo hago yo.
-No te voy a poner en un compromiso.
-Solo es un detalle, por lo preciosa que eres.
-Muchas gracias, pero no tienes porque hacerlo.
Se besan, ella empieza a mirar sin saber lo que quiere. De vez en cuando le pregunta a Enrico si le gusta, él le dice a todos que si, pero luego ella se arrepiente y coge otro.
Tras una dura decisión. Se enamora de uno, rojo con volantes por debajo, muy corto y con un escote precioso; tiene las mangas de medio brazo y los bordes de encaje, tiene un cinturón rojo que recorre toda su cintura, llena de perlas y por delante un lazo rojo.
Escoge unos zapatos dorados de tacón, con cruzados por delante que hacen varias formas; también se ha cogido un bolso ha juego de los zapatos.
-Muchas gracias Enrico, me ha gustado mucho, ¡mira que vestido, mira que zapatos y que bolso!- Le da un beso- Y ¿dónde me vas a llevar esta noche?
-Es una sorpresa-Le guiña el ojo
-Otra más... no me lo puedo creer, eres el mejor.
-Ya te lo e dicho antes, es una fiesta pija, pero no te voy a decir donde es y quienes van.
-Jo, Enrico no seas así...-Finge enfadarse.
-Me encanta que estés enfadada estas muy guapa así que lo sepas.
-Ja, ja- Se burla- que gracioso eres; pero, ¿sabes qué? que te quiero.
-Y yo a ti.
Y se besan, se quieren, son felices, ya tres semanas juntos y como si fuera una vida.

Laura está sentada en su coche y no se quita las Ray Ban por nada en el mundo. Finge leer un periódico para disimular. -No se han dado cuenta- Piensa.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Capitulo 2

Tarde, tarde de calor, tarde de verano, tarde de sol, tarde de un día en la playa, tarde de brisa caliente.
Andrea anda por una calle muy estrecha, entre edificios muy altos y poca gente andando por esa zona.
Llega a su casa, un chalet muy bonito de ladrillo visto de cuatro dormitorios y en cada cuarto de baño un jacuzzi. Vive solo y tiene veintitrés años, sus padres le echaron de casa por traer a la novias y a veces a prostitutas. Se independizó, se compró un Renault y trabaja como practicas de gimnasia, y por la tarde en el gimnasio Kronos de lunes a viernes. Él es rubio con los ojos azules, viste ropa elegante todo lo contrario a Karl.
Toca al timbre y responde Enrico.
-Hola Andrea- Le da un beso -Que sorpresa, tenía muchas ganas de verte, no puedo parar de pensar en ti, entra.
-Hola Enrico, yo también tenía muchas ganas de verte.
-¿ Quieres tomar algo? Zumo, coca, vodka, ron...
-No, no, algo flojo, una coca.
-Vale.
Se va a la cocina, le hecha una coca-cola en un vaso con hielo, una rodaja de limón y una pajita. Se dirije  al salón, ella está ahí sentada con las piernas cruzadas seria. Se lo da, él se sienta frente a ella.
-Enrico, tengo que decirte algo.
Se lo cuenta, él esta muy serio, escuchándola, conoce a Karl de hace unos años cuando le daba clase, él nunca hacia gimnasia y le contestaba mucho. A los dieciséis Karl se fué del instituto, ese año no lo a vuelto a ver más. Lo bueno, piensa, que ella no esta en su instituto...
-Pero, ¿me vas a dejar?
-No cariño, no pienso volver con él en la vida, te quiero a ti y a nadie más-Termina el último sorbo de su coca-cola- Pero, ¿por qué quiere que vuelva con él?
-Amor, porque eres la chica mas preciosa del mundo, eres cariñosa y muy romántica, así es normal que se enamoren todos de ti.
Ella, se levanta y se pone al lado de él; le da un beso muy intenso,largo, intercambiando saliva, una lengua enredándose con la otra, lento, muy lento y muy apasionado.

martes, 18 de octubre de 2011

Capitulo 1

-Hey, Pero, ¿Por qué coño siempre vas con prisas?, ve un poco mas lenta por una vez...
-Lo siento Susanna. Pero, ¿Es que tu no te das cuenta de que llegamos tarde?
-No pasa nada Andrea, si por un día no va a pasar nada...
-¿Qué hablas?, ¿Cómo que un día?, llevamos por lo menos cien días llegando tarde y menos mal que hace poco hemos empezado el curso... Bueno, venga, date prisa, que ya oiste lo que dijo la última vez que llegamos tarde, que nos quitaba dos puntos para la evaluación, y yo por mi parte no quiero suspender.
-¡Joder, es verdad, ya no me acordaba, venga vamos!.
-Ofú -Suspira- Mira que llegas a ser retrasada.
-Oye Andrea tampoco te pases.
Y empiezan a correr para poder llegar a tiempo.Con sus cabellos al viento, una rubia, la otra morena, una un poco más alta que la otra; una con flequillo que se le va para atrás por el viento; la otra intentando ponerse una horquilla... Y corren, y ríen. Y llegan.
-Susanna y Andrea, ¿ volvéis a llegar tarde?, a ver que excusa me ponéis ahora.
-Perdón profesor es que Andrea va muy lenta.
-Pero ¿qué dices? si has sido tú.
-Bueno si, profesor, lo sentimos, para la próxima vez intentaremos llegar un poco mas deprisa.
-Bueno, no os voy a quitar dos puntos, pero os vais a quedar toda la hora de pie.
-Pero profesor...
-Chs -Le interrumpe-, como me repliquéis vais a hacer que me arrepienta de no haberos bajado dos puntos
-Vale.

Karl, el ex novio de Andrea, esta escribiendo una carta, a saber lo que escribe y a saber para quien es. Él es im chico alto pelo punky y moreno con ojos verdes; viste camisetas anchas y pantalones cagados y muy bajos, se le ven siempre sus calzoncillos de marca, Kalvin Klein. Lleva siempre unos collares con el signo ''$''y unos pendientes en las orejas de diamantes muy brillantes. Tiene 19 años, y un Mini; una Harley de su padre que él solo la coge en ocasiones especiales.

Cuando acabo las clases, Andrea se dirigió directa para su casa sin parar para hablar con sus amigas.
-Andre, ha llegado una carta para ti -Dice su madre- No se de quien es, solo pone ''Para Andrea''
-Ah vale mama, gracias- Le sonríe.

-Querida Andrea-, Empieza a leer -Siento mucho aber dejado la relación, pero es que estaba muy mal por lo que había pasado- Andrea tiene la cara muy seria, no quiere ni pensar lo que le seguirá diciendo en esa carta. La deja encima de la mesa, no quiere seguir. Enciende la radio, la cadena de siempre y empieza a sonar una canción que le gusta mucho ''Estaba claro que no podíamos ser agua, que lo que sientes no puede verse desde aquí'' Y la canta y la siente, le recuerda a todo o quizás a nada ''Aun que me canse y vengan miles de días grises, aun que mis palabras quieran rendirse entre la lluvia de cristal'' Se la cantaba cuando estaban juntos, en su primera cita en el césped de la casa rural que le llevo, ese 15 de junio que también era su cumpleaños, se lo pasaron genial, le regalo un iPod que acababa de salir. Pero todo esto se terminó, le dejó, le insultó y le pegó, pero ella no le izo nada, se arrepiente por no haberle dicho todo lo que tenia que haberle dicho y ahora viene pidiendo perdón. A acabado, se acabó. No volverá con él jamás, por nada del mundo. Me gusta Enrico y nada ni nadie me va a hacer cambiarlo.
Más tarde se lo piensa mejor y decide leerla:
-No tenía que haberte pegado, te vi con mi mejor amigo besándote, pero te quiero y me da igual que te besaras con él.
Si, es verdad, me lié con su mejor amigo, pero el a mi no me quería, y seguro que él a mi me puso los cuernos, me lo decía todo el mundo, y tenia mas detalles con mis amigas que conmigo, así que no lo pienso perdonar.
-Te quiero, nunca te he olvidado y no te pienso olvidar.
Ya, cuando estabas conmigo nunca me dacias eso, y no me das ninguna pena, así que no insistas.
-Tres meses de relación no fue nada con lo que yo te hubiera dado, quiero empezar de cero, vivir más momentos de los que tuvimos, ir otra vez a la casa rural y darte mas de mi, pasar todo una vida juntos, a pesar de que solo tengas 16 años, pero se que te necesito, se que no sabría llevar una vida sin tu sonrisa, sin tus besos, sin ti.
Que no, decidido que no, Enrico me quiere y me da muchos mas momentos de los que pase contigo y nosotros solo llevamos dos semanas, no quiero ni pensar cuando llevemos un año, por ahora somos la pareja mas feliz de este mundo y nadie me lo va a quitar.
-Y si por si acaso no te acuerdas de mis abrazos yo te dejo mi canción: Te quiero.
¿Cómo se puede ser así? que idiota es de Maldita Nerea, y me la cantabas. No me voy a ir con él. Muy decidido.
Guardó la carta en el cajón de su escritorio color violeta. Se echa su perfume de coco y se va a casa de Susanna para contárselo, la llamaría al móvil pero no tiene saldo.
Rin. Llama 1º4. Contesta su madre.
-¿Si?, ?Quién es?
-Soy Andrea.
-Susanna no está, ha salido con Paula.
-¿Sabrá por casualidad donde está?
-Si, han ido a Villa Dorita a tomarse un café, te ha llamado pero no se lo has cogido.
-Estaba ocupada. Muchas gracias, adiós.
-Hasta luego Andrea.
Y se va, a toda prisa. Se encuentra con varios amigos los saluda y se despide. Llega, casi sin aliento.
-¡Andrea,que sorpresa!Te he llamado y no me lo has cogido.
-Ya... es que es que no lo he escuchado, y estaba haciendo una cosa que te tengo que contar. Hola Paula, que no te e dicho nada, lo siento.
-Hola Andrea- Se dan dos besos- ¿Qué tal preciosa?
-Muy bien, gracias.
-¿Qué me tienes que contar tan importante? -Interrumpe Susanna.
-Más tarde- Y mira a Paula
-Ah, perdonadme, he quedado con mi madre, lo siento me voy.
-Vele, adiós-, Se dan dos besos- que te lo pases bien con tu madre.
Se va riéndose, se sientas, Andrea se pide un café cortado con doble de azúcar.
-A ver cuéntame
-Karl... me ha enviado una carta.
-¿¡QUÉ!?, ¿que te a dicho ese idiota?
-Pues que quiere volver conmigo y que esta muy arrepentido.
-Pero, ¿vas a volver con él?
-¿Despúes de lo que me ha pasado?, no creo, además estoy enamorada de Enrico, y no lo pienso dejar por nada en el mundo.
-Pues claro, Karl no vale la pena y quien sabe si él te puso los cuernos a ti...
-¿Qué quiere decir?, ¿tu crees que él me los puso?
-Si, lo mas seguro.
-Puede ser, yo también lo creo, no me fío de él.
-Pero da igual Andrea, pasa de él, te pegó y tu estás con Enrico, disfrútalo ahora que lo tienes.
-Gracias Susanna, no se que haría yo sin ti. Bueno me voy- Le da un beso en la mejilla- Tengo que hablar con Enrico
-Adiós.